𝓢𝓽𝓻𝓪𝔀𝓫𝓮𝓻𝓻𝔂 | 𝘳𝘺𝘶𝘷𝘪𝘯

26. 𝕸𝖎 𝖚́𝖑𝖙𝖎𝖒𝖆 𝖛𝖎𝖉𝖆

El demonio comenzó a sentir que algo ocurría al no ver a su amigo atacando a los cazadores, como lo había planeado, por lo que decidió ir en su búsqueda.

―¿A dónde vas? ―le preguntó Hanbin.

―Ricky no está aquí ―Miró a su alrededor ―. Tampoco está el cazador líder.

―Si vas a buscarlo, iré contigo.

―No, tú debes refugiarte.

Antes de que Hao pudiera buscar a su amigo, un lobo de pelaje marrón se apareció frente a él y a Hanbin, con Gyuvin y Ricky sobre su lomo.

―¿Yujin? ―Preguntó Hanbin ―¿Eres tú?

Con lo último que le quedaba de fuerza, Yujin logró llevar a Gyuvin y Ricky hasta donde se encontraba el demonio, porque creía que él era el único que los podía ayudar.

―Nos atacaron ―Dijo el más joven mientras regresaba a su forma humana ―. Tienen que salvarlos ―Sostuvo su brazo herido.

Al ver a su amigo en ese estado, Hao supo que ya era demasiado tarde, pero, de todas maneras, le pidió ayuda a Hanbin, para que sostuviera a los heridos, mientras él hacia lo posible para trasladarlos a todos hasta su habitación, donde podría hacer algo.

―¿Puedes trasladarnos? ―Preguntó Hanbin.

―Lo intentaré ―Respondió el mayor.

Mientras Yujin, Gyuvin, Ricky, Hanbin y Hao se trasladaban hasta la universidad, la manada de lobos de la universidad se encontraba asustando e hiriendo a los cazadores, quienes no sabían que hacer frente a tantos lobos.

―¡Aléjate! ―Le gritó un cazador a Matthew.

Matthew estaba tan molesto, que comenzó atacar a todos los cazadores que se cruzaban en su camino y estos, al verse completamente acorralados comenzaron a buscar la manera de huir del bosque a través del lago.

―Los lobos no podrán nadar ―dijo un cazador ―. Subamos a nuestros barcos.

Lo que los cazadores no esperaban, era que en el lago se encontraban las sirenas esperándolos para ahogarlos, y es que, Ricky se había encargado de avisarle a la universidad de chicas que había cazadores en el bosque, y estás decidieron ayudar a exterminarlos.

―Suficiente Matthew ―Dijo Gunwook después de convertirse en humano ―. Ya no quedan cazadores.

Matthew comenzó a aullar, pero esta vez con más fuerza que nunca, en honor al vampiro.

―Matthew, hay que regresar ―Dijo Gunwook intentando que lobo entrara en razón.

―¡Matthew! ―le gritó Taerea ―. La guerra ya terminó y debemos regresar.

Matthew no quiso escucharlos y decidió seguir en su forma animal para así alejarse de todos.

―Iré por él ―dijo Gunwook.

―No, no lo hagas ―dijo Taerae con tristeza ―. Hay que dejarlo solo un momento.

Mientras los estudiantes regresaban a la universidad, Hao estaba haciendo todo lo posible para mantener a su amigo y a Gyuvin vivos, a la vez que Hanbin curaba la herida de Yujin.

―¿Podrás salvarlos? ―preguntó Yujin.

―Solo puedo hablar por Ricky, pero no por Gyuvin, porque no puedo controlar la vida de los humanos ―Respondió el demonio.

―¿Entonces mi hermano morirá? ―Preguntó el menor.

―No exactamente, pero me temo que yo no puedo hacer nada más por él ahora. Más que trasladarlo hasta un hospital de humanos, pero me temo que ya he usado mucha de mi energía y en este momento, si quiero salvar a Ricky debo ir al infierno y rescatar su alma del limbo.