Addison Cuthbert y Gilbert Blythe siempre han sido mejores amigos desde que tienen memoria, eran inseparables y todo lo hacian juntos, hasta que el padre de Gilbert fallece, el decide irse de Avonlea sin decir absolutamente nada, ni siquiera a su me...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-En serio tenemos que dejar de vernos asi, pero vernos aqui otra ves Señor huesos y no se ve mejor que en nuestra otra reunion o debo llamarla, desmpolbada, parece qeu no hay mucho que el buen doctor pueda hacer por usted, ya deberia empezar a cuidarse jovencito, se esta consumiendo-decia la mujer mientras limpiaba un eskeleto de exibicion-Oiga, no se que clase de chica cree que soy pero acaba de conseguir una cita con mi padre y su escopeta, sin embargo, si le disparan, sere yo quien lo vuelva a armar y eso haria que se propasara otra vez, veo que estos encuentros no lo ponen nervioso, pero lo que se es que ya no tiene nervios, lo que seria bueno si recibiera un disparo, ¿Dice que fue un accidente lo de hace rato?, ay, se ve muy guapo cuando se arrepiente de esa forma Señor huesos, lo perdonare-decia.
Mm-dijo de la nada Gilbert apareciendo en la habitacion mientras miraba a la mujer con una sonrisa.
Gilbert habia ido al consultorio de su tutor, pero para su sorpresa ahi estaba su hija, Winifred, quien Gilbert ya conocia desde que llego a su primera leccion en Charletown, el sabia de su gran humor y carisma de la mujer un poco mayor que el.
-¿Vino por el espectaculo?, ¿Quiere boleto para uno?-dijo para despues mirar al esqueleto-Señor Huesos, ¿Le quedan boletos?, me temo que ya estab agotados.
Gilbert solo miro todo con el ceño fruncido.
-Buenos dias Señor Blythe-dijo la mujer pasando por el lado de el con una sonrisa.
-Igualmente Señorita Rose-dijo Gilbert mientras se quedaba pensando mirando al suelo, hasta que reacciono-Si el Señor Huesos me lo permite, ¿Aceptaria ir conmigo a tomar el te?-le pregunto.
Ella asomo su mirada hacia el maniqui que estaba en la otra habitacion y se quedo en silencio un momento, pero luego miro a Gilbert con una gran sonrisa.
-Suena encantador-le dijo.
Gilbert al escucharla, sonrio como un bobo mientras le agradecia con las manos, no dejaba de mirarla que choco con la pared de atras,haciendo reir a su acompañante al igual que el como un tonto y salia del establecimiento.
Cuando Gilbert y Winifred llegaron a la cafeteria, este se sentia totalmente nerviosa por la mujer que tenia frente a el, ella vestia un vestido azul y un sombrero que combinaba perfectamente con su atuendo, en cambio Gilbert tenia un saco formal como el que siempre llevaba. Cuando Gilbert quiso toma coso para servir té, Winifred le golpeo levemente la mano, y tomo esta y le sirvio a Gilbert, este solo miraba la accion de la mujer totalmente confundido y nervioso.
-Y, Winifred, ¿Que edad tienes?-dijo de la nada Gilbert.
Su acompañante empezo a toser y ahogandose con el Té que tomaba.
-¿Esta es su primera cita, Señor Blyhte?-le pregunto Winifred con un tono un poco burlon.
