A veces todos nos cansamos del ruido. Motocicletas, gritos y lloriqueos de bebés son algunas de las cosas que oímos día a día.
Seonghwa no puede escuchar nada de ruido, es sordo. El no se cansa de no poder escuchar nada, como: ver a su mamá hablar con sus hermanos mayores, ver a los trabajadores martillar una casa, ver a los perros ladrar en la calle cuando pasa caminando.
Solo puede observar y sentir.
Y cuando ve a un chico nuevo en el café donde suele ir todos los viernes por las tardes sintió nada más que curiosidad. Es un chico bajito con el cabello negro. Lleva puesto un mandil café sobre una camiseta blanca como suele ser el uniforme, pero para Seonghwa se ve especialmente lindo en el.
Cuando es su turno de ser atendido simplemente le sonríe y señala su usual bebida de elección que es un capuchino de vainilla con canela, no lo quiere hacer difícil para ese nuevo trabajador, asi que también apunta hacia el tamaño de la bebida.
El chico pelinegro le sonríe de vuelta una vez que sus miradas se desvían del menú y se conectan entre si. El chico comienza a hablar, pero Seonghwa no escucha nada, ni siquiera puede leer sus labios porque, por alguna razón, esta perdido en demás facciones de su rostro. Cejas algo arqueadas, ojos grandes, pestañas largas, nariz respingada, labios rosados y cuando lo une todo completo solamente ve... Un rostro de confusión.
Demonios, debió ponerle atención a sus labios.
Rápidamente Seonghwa limpia su garganta cuando ve ese rostro, necesita decirle algo, por lo menos unas de las pocas palabras que sabe pronunciar.
— Soy sordo — dice, acompañado de las respectivas señas con sus manos.
La cara del que parece ser más bajito se tiñe de rojo al instante y hace un alemán, juntando su dedo pulgar e índice para dar a entender que vuelve en un momento.
Seonghwa lo ve irse y no tarda ni dos minutos en volver con un otro trabajador detrás de el, ademas de un papel y bolígrafo. El trabajador le sonríe a Seonghwa pues ya sabe que es un regular, incluso Seonghwa sabe pronunciar su nombre: Yunho. Ese otro alto trabajador sabe algunas señas, pero deja que el nuevo haga el trabajo por su cuenta mientras lo observa.
Mientras los conocidos se daban algunas sonrisas, el nuevo escribe algo en el papel que le fue entregado al cliente y este lo leyó, asintiendo a la pregunta de "¿Con hielo?" poniendo el papel de vuelta en el mostrador.
De nuevo, el chico escribe otra cosa: "¿Nombre?".
— Seonghwa — contesta el sordo, siendo otra de las palabras que puede pronunciar.
El trabajador sonríe y después señala la etiqueta que está en el delantal, tiene el nombre de "Hongjoong" grabado ahí. Ese será otro nombre que necesitará aprender Seonghwa. Después de anotar el pedido el ahora conocido como Hongjoong muestra el total en la computadora el cual Seonghwa ya tiene grabado cuánto es, por lo que da el dinero exacto.
Cuando se dan el dinero sus manos rozan un poco, solo un poco.
Y cuando siente las manos de ese chico se sorprende de lo suaves que son. De lo pequeñas que se sintieron.
No evita sonreírle, el otro devuelve la sonrisa y sin que el mas bajito supiera que dice, el otro habla en señas.
"Eres guapo".
Sin embargo Hongjoong no entiende y solamente asiente y sonríe. Después procede a hacer la bebida. Yunho se queda ahí en el mostrador con Seonghwa sonriendo pues ese trabajador si sabe algo de señas por lo que empieza a entablar una conversación.
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"Te Siento" [SEONGJOONG]
FanfictionHongjoong comenzó a trabajar en una tienda de café y un cliente que llegó es sordo. Hongjoong odia secretamente a los sordos. ¿Él podrá hacer que cambie de opinión? ❣️ Fanfic corto. ❣️ Capítulos cortos. ❣️ TW: Ignorancia/odio ante las personas sorda...