꒰O1O꒱

1.2K 102 2
                                    

Jimin y Minjeong caminaban por aquel parque donde hace más de tres meses, habían paseado la noche que se declararon

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Jimin y Minjeong caminaban por aquel parque donde hace más de tres meses, habían paseado la noche que se declararon.

Jimin la llevaba tomada de la cintura y Minjeong simplemente disfrutaba de ese momento junto a su novia.

Estaban felices, pues aquel amor que se tenían era totalmente único y se lo demostraban la una a la otra de tantas maneras, que incluso en una sola mirada, se sabía que iba cargada de amor.

—¿De qué te ríes?— le preguntó Yu, quién aún la llevaba de la cintura.

La vió de una manera tan especial y bonita, por finalmente poderla llevar así a cualquier lugar y decir felizmente que ella era su chica.

—Es que— comenzó a explicar la menor aún con una sonrisa en su cara.—Hace tan sólo unos meses, yo quería ser Jeno.

—¡Por Dios! ¡Qué horror! ¿Por qué querrías tal abominación?— le preguntaba con una mueca después de que la otra dijera eso.

—Pues... yo quería que tú me vieras como lo veías antes, que me abrazaras como a él, incluso que-

Jimin posicionó sus labios sobre los de la menor, callándola de decir todas aquellas cosas que ella se encontraba enumerando.

No había nada mejor que callarle con un beso.

Por su parte, Minjeong le siguió en aquel beso que Jimin le estaba proporcionando, de manera cálida, llegando a rodear también su cintura, mientras que Yu le tomaba del mentón.

Al separar sus bocas, Jimin sonrió, pero sin haberse separado tanto de la rubia, y comenzó a hablar mientras la tenía cerca, aún.

—No digas esas cosas, bebé— le dijo aún tomándola del mentón. —Eres y serás mi único amor.

La rubia sonrió. Jimin sabía cómo hacerle sonreír fácilmente.

—Te amo— susurró Kim con los ojos aún cerrados, mientras dejaba caer una lágrima.

Por supuesto, Jimin la notó y la limpió con su mano, preocupada.

—¿Por qué lloras?— le preguntó confundida de aquella imprevista lágrima.—Esta cita es para celebrar nuestros cien días, no deberías estar llorando, Winnie, además, si tú lloras, lloro yo también.

—Sin lágrimas de felicidad, Yuji— dijo y esbozó una sonrisa algo tierna para la mencionada, por la cual ella también rió.—Me recuerda como me enamoré de ti hace un tiempo.

—¿Ah sí?— le dijo, y volvieron a caminar tomadas de la mano, admirando aquel bello paisaje que se les presentaba.—¿Cómo fue?— Minjeong esquivó la mirada que la otra le estaba dando, pero era porque se había sonrojado. Jimin sabía cómo sonrojarla fácilmente también.—Dime, por favooooor— suplicó y la rubia dudó, pero al final accedió.

—Es que tú siempre estabas ahí, siempre— comenzó a explicar.—Siempre fuiste muy buena conmigo, atenta, no me dejabas sóla y además, Jiminnie, tú atraes a cualquiera, no lo dudes— continuaba hablando Kim, teniendo toda la atención de su novia.

»Cuando me dí cuenta de que te gustaba Jeno, me derrumbé y ese día en que me dijiste que eras su novia, lloré durante mucho tiempo, Taehyung dice que lloré toda la tarde, pero ahora te llevo de la mano, y soy más feliz que nunca.

»Además, Jimin, tú tienes el corazón más puro, los sentimientos más bellos, no cualquiera merece que entregues todo de ti, y yo...— Jimin alzó sus cejas, esperando lo inesperado—, te llevo aquí de la mano, y eres lo mejor que me pudo pasar.

Ahora la sonrojada era Yu escuchando eso. Realmente ella nunca había notado aquello, pero también se sintió mal por haberla lastimado, jamás pensó llegar a hacerle daño a la persona que más amaba, pero lo hizo, y eso la puso un poco triste.

—Siento mucho haberte hecho llorar, Minnie— se disculpó.

—No tienes que disculparte por eso— le decía mientras le acariciaba la mejilla, pues ahora Jimin la había abrazado.—Estamos de aniversario, ¿recuerdas?

Jimin asintió y le besó la mejilla. Se sentía completa, cálida y feliz ahora.

—Sabes— dijo Yu para caminar nuevamente—, yo me enamoré de ti porque, además de que eres muy linda y quitando el hecho de que eres un ángel, eres simplemente única y te amo por eso. Eres especial, bebé.

Minjeong no dijo nada, simplemente se dedicó a sonreír, no tenía más que decir, pues estaba completamente feliz de lo que estaba viviendo ahora.

Estaba total y completamente segura de que Jimin sería parte de su presente y de su futuro, la amaba más que a nada, y ni hablar de Yuji para ella, Min era la niña de sus ojos, y la amaba infinitamente y estaba segura de que eso sería para siempre.

Al menos ahora Kim, ya no desearía ser un chico, específicamente, él, pues tenía lo que más amaba, y Yu también, se tenían la una a la otra, y eso las completaba.

i wish i ✧ winrinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora