Te Amo

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Hubo una razón por la que pude ganar, ví un hilo, que me guía hacia el punto débil de mi oponente y ataco.

¿Que hago ahora?

Escuché pasos, era el señor Urokodaki..

- La verdad no tenía intenciones de enviarte a la selección final, porque no quería ver a ningún niño morir...
No creí que fueras capaz de cortar la roca a la mitad

Él me acarició la cabeza, ¿Por eso era tan duro conmigo? ¿A qué se refiere con que no quería ver otro niño morir, la selección final es así de dura?

- Tanjiro, estuviste magnífico.

No sé en qué momento mis ojos empezaron a lagrimear.

Todo este tiempo estaba haciéndome el fuerte, como si no me importará la muerte mi familia, como si no fuera relevante el hecho de que Nezuko ya no era la misma y no había podido hablar con ella y desahogarme en más de dos años, y ahora que he logrado una parte de lo que quería ¿Que hago ahora?

- Escúchame bien, vuelve con vida de la selección final, tu hermana y yo te estaremos esperando.

Abrace con fuerza al señor Urokodaki, de verdad necesitaba un abrazo

Comí bastante bien esa noche, el señor Urokodaki me dijo que era para celebrar el final de mi entrenamiento, le agradezco todo lo que ha hecho por mí.

Cortaba mi cabello

- Oye, Tanjiro

- ¿Si?

-¿Te gustó el estofado?

-¡Si, por supuesto! ¡No había comido tan bien hace mucho tiempo!

- Si comes bien te harás más grande y fuerte, lo mismo aplica para demonios. No lo olvides, mientras más humanos haya devorado un demonio, más fuerte será.

-¿Se hacen más poderosos cuántos más comen?

-Exactamente, algunos cambian sus rasgos físicos y otros utilizan hechizos extraños. Sí mejoras tu olfato podrás saber cuántos humanos devoró y así medir su fuerza.

Abrió un armario y me dió una máscara parecida a las que tenían Sabito y Makomo

- Ten

- ¿Y esto que es?

- Es una máscara protectora, la encante para que nadie pueda hacerte daño

- Entonces para eso se usa

La mañana llegó pronto, me vestí con un haori parecido al del señor Urokodaki, fui una última vez a checar como estaba Nezuko, todo parecía estar bien.

- Te prometo que volveré por ti, Nezuko.

-¡Ya me voy, señor Urokodaki, saludeme a Sabito y a Makomo!

Llegué de noche al lugar, todo estaba iluminado por glicinias , creí que ya no era la temporada.

Había muchas personas.

-Hola a todos. Gracias por venir a la selección de cazadores de esta noche, se los agradecemos

Hablaron al mismo tiempo unas gemelas, que miedo.

- Aquí, en el monte Fujikasane, hay demonios, fueron atrapados y mantenidos aquí para este evento- Habló la de pelo albino.

- La mitad de esta montaña está cubierta por glicinias, estás flores ahuyentan a los demonios, eso evita que escapen- Al parecer hablan por turnos.