¿ᴇɴ ϙᴜᴇ́ ʟᴇ ᴘᴜᴇᴅᴏ ᴀʏᴜᴅᴀʀ? [Donatello2007xTú]

sᴇɴ̃ᴀʟ ᴅᴇ́ʙɪʟ

꒰💻꒱ : : : : . · · . ₍♡₎;;〉

—Buenas noches, esta hablando al servicio de ayuda de Easi, la telefonía e internet neoyorquina líder, mi nombre es Donatello, ¿En que le puedo servir?— la voz sosegada, con un tono cansada salió de la bocina de mi teléfono de casa, los nervios se apoderaron de mi

Y entonces... ahí fue

—B-buenas tardes, bueno... casi noches, ¿Qué día no?—

Otra vez me traicionó el miedo. Intenté oírme segura y confiada pero todo salió muy mal desde el inicio del día

¿Como accedí conmigo misma a esto?

: : : : : : . · . · . · . · . · . · . · . · . ₍♡₎

La mañana ajetreada había comenzado, madrugando corrí entre las oscuras calles del barrio yendo un poco tarde al trabajo, mi vestido café acompañaba mi perfume a lavandas que iba impregnado en mi cabello recogido en una coleta adornada con una suave liga para cabello a tono con mi suéter grisáceo de lana.

No recordaba el momento en que salir en las mañana a mi trabajo se había vuelto peligroso. Mis labios abiertos intentaban jalar el oxígeno de forma desesperada sintiendo un alivio al ver la puerta de la panadería abierta. El día al fin comenzó.

El aroma a pan recién horneado y vainilla inundaba el establecimiento, las mesas limpias reflejaban los ventiladores del techo, mientras mi vestido café era cubierto por la bata de cocina, mis nervios estabas a flor de piel mientras amasaba lo que sería un baguette, mis ojos pararon en el tarro de harina como si fuera lo más interesante del mundo.

—Hey, ¿está todo bien T/N?— una chica pelinegra de bata blanca le interrumpió mientras dejaba una masa de galletas con chispas de chocolate en el mesón, su mirada era de preocupación genuina hacia su amiga— ¿Es por lo de anoche linda?— comenzó a aplanar la masa con un rodillo de madera

—Ah... — dejé un momento de amasar y simplemente apretujé la masa entre mis dedos— Si... algo así Dalia... — seguí con mi tarea sin mostrar mis ansias de quebrarme

—Vamos linda, todo estará bien, eres la indicada para tener el puesto de jefa de cocina y lo sabes bien. La jefa tiene justa razón para querer hablar contigo sobre eso— ahí pudo ver cómo paró en seco su deber— ¿Es por eso que estás así hoy?...—

Su oración fue interrumpida por un una mano llena de masa que la llevaba al área de los baños

—¡Sabes que soy tímida! — dije en un tono moderadamente alto al sentir como mi cara enrojecía — ¿Qué se supone que haré cuando tenga que decirles que hacer?— mis ojos aguantaban las saladas lagrimas mientras veía a Dalia con un semblante sorprendidamente enternecido, algo que me hizo avergonzar más— ¿Y-y si algo sale mal?, ¿Qué se supone que debo de decir?— comencé a intentar gesticular mil y un razones por las cuales yo no sería buena para el puesto, sin embargo fue interrumpida por un abrazo de mi amiga

—Ay linda, eso es lo que me agrada de ti— dijo acariciando su cabello en el abrazo— ya verás que todo estará bien, lo lograrás porque eres increíble, organizada y te preocupas por el trabajo— se separó para apretujar las mejillas de su mejor amiga

—Está bien...— dije resignada sabiendo que ella puede que tenga razón — además las cuentas no se pagan solas— bromeé para escuchar una risa de Dalia

—Si, las cuentas no se pagan solas— repitió Dalia con una sonrisa soltando el rostro de la contraria— Pero mientras— hizo una breve pausa subiendo y bajando en sus talones con emoción— ¡Tenemos que practicar en tu confianza!,— se separó y le dio un leve golpecito en el hombro— Así que hoy en la noche hablemos por mensaje después del trabajo para idear formas para que puedas hablar con extraños, eso reforzará tu comunicación con las personas.— concluyó con emoción Dalia irguiéndose de orgullo