Cap 14

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Narra ___:

-Sonamos. - Dice Mosca después de asomarse. - Por adelante no podemos entrar.

-Por la cocina tampoco, ahí está Saverio, y nos puede ver. Este hombre siempre está pegado en la cocina. - Sigue Corcho, poniendo sus manos en la cintura.

-Pero podemos entrar y decirle que venimos del partido. - Vuelve a hablar Mosca.

-Y pero de este, - Corcho señala a Roña. - no se la va a creer. -

-Pero yo ya se por donde se puede meter él. -

-¿Donde? - Le pregunta Roña a Mosca.

-Podes entrar por los techos, y de ahí a la medianera y ahí a nuestro patio. -

Después de eso, Roña empezó a subir y andar por los techos. Nosotros lo mirábamos, cuando Mosca, Corcho y Guille lo alentaron.

-Dale Roña, dale. Ya pasaste lo peor, dale. -

-Pensa en los sanguchitos que te va a hacer Saverio cuando llegues. -

-Te falta poco para llegar al techo dale. -

Cuando estaba a punto de llegar, se cayo al patio del vecino.

-Es el carpintero. - Nos dice Jimena.

-¿No podías caer para este lado? - Le preguntó.

-Roña, ¿estas bien? - Pregunta Guille.

-Si, pero no me voy a poder sentar por una semana. -

-¿Que haces vos acá? -

-Parece que lo agarro el vecino. - Dice Jime.

-Hagamosnos los simpaticos. ¡Señor! - Le grita Guille. - ¿Se encuentra bien hoy? ¿Amanecio bien? Eh, ¿nos puede devolver una cosa? -

-Si, devolver que, a plantar papa fritas los voy a mandar, ahí lo voy a mandar. -

-Es que se nos cayó algo de su lado, queríamos ver si usted nos lo podía devolver. - Le dice Jime.

-No señor, todo lo que se cae en mi jardín es mío. De mi propiedad, ¿entienden? Y vos va, va. Levantate, apurate, dale vamos, no te hagas el tengo y anda para allá. Vamos. Vamos camine. -

-Hay que rescatarlo. - Dice Jimena.

-Ahora si que la embarramos. -

-¿Más lo que estábamos antes? Imposible. - Le responde Guille a Corcho.

-Hay que recastarlo. - Repite.

-No, Jimena, ahora si que va a tener que venir Belén. - Le digo.

-¿Estas loca nena? ¿Que te pasa en la cabeza? Nos llega a agarrar Belén y nos mata. - Responde Corcho.

-Y ahora ¿que hacemos? - Pregunta Mosca.

-Déjenme pensar. -

-Entonces pensa rápido Guille. - Le digo.

Después de eso, entramos por la cocina, pero nos freno Saverio.

-Haber un momentito, momentito. Niños, ¿de donde venis vosotros? -

-Eh, fuimos a jugar un partido de fútbol. - Responde Mosca. - Con los chicos del barrio.

-¿Por que quedasteis en ese estado lamentable? Tomi ven aquí un momento. -

-Si, acá estoy. Perdon, ¿estos no son mis anteojos? - Le saca los lentes a Mosca. - Estos no son los anteojos de Piojo... - Ahora se los saca a Corcho. - ¿Me parece a mi o acá hay algo raro? -

-A ver esa carita. -

-Es que eh... - Corcho no sabe que decir para hacernos safar.

-Pero mi Dios. ¿Que habéis estado haciendo? -

-Eh fue un partido muy, muy rudo. Los chicos eran muy malos. Pegaban mucho. - Dice Mosca. Mientras tanto, me quedaba atrás de ellos al lado de Jime, para tratar de esconderme.

-¿Que fue? Un partido así de fútbol o una especie de boxeo. -

-Bueno, che no es para tanto, son unas pequeñas marquitas nada más. - Dice Guille.

-Eso, además los chicos están muy sucios, así que se tienen que bañar. - Jime nos empuja para que movamos.

Pero cuando nos frenan, choco contra Mosca en el lugar del moretón.

"Ay, ay, ay." Llevo una mano al ojo derecho.

-Si, si, están de verdad muy sucios. Os vais a bañar. Pero limpiar bien las orejas y la cabeza eh. -

-Hablando de bañarse. Roña, ¿donde esta? -

-Eh, me parece que estaba por acá. - Digo fijandome abajo de la mesada.

-Si, se quedó en la cancha de fútbol. ¡Roña! - Todos salimos corriendo con el grito de Guille.

Nos sentamos en los sillones de la sala.

-Chicos, no se que nos conviene. - Dice Corcho.

-Para mi que ___ tiene razón, hay que decirle la verdad a Belén. - Mosca mientras habla se lleva una mano al ojo golpeado.

-Si ella va a hablar con el vecino, seguro se arregla todo. - Cuando Guille termina de hablar aparece Belén con Jimena.

Nos sentamos como si nada pasará, con Mosca, Corcho y yo dándole la espalda y tapandonos de ella.

-Y chicos ¿se sabe algo de Roña? -

-No, pero le ibamos a decir a Belén para que lo fuera a buscar. -

-Pero con lo que nos dijo ahora no podemos. - Me respondio Corcho.

-Para mi, le tienen que ir a pedir ustedes. -

-¿Nosotros? - Le dice Mosca.

-Jimena tiene razón. La cosa, es quien. - Decreta Guille.

Hicimos un terrame, algo que nunca entendí, pero por suerte me safe de ir. El único que quedó, fue Guille, así que él tenía que ir.

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