Querido diario, ma llamó Derio y mi psiquiatra me ha dicho que para poder seguir controlando mis emociones, debería escribir lo que siento y lo que pienso.
Ahora mismo tengo 35 años y cuando tenía unos 28, me pasó algo que a día de hoy sigo sin comprender bien. Pensé que nunca podría cambiar, que sería una mala persona para el resto de mis días, y alomejor sigo siéndolo, no lo sé, supongo que tengo que seguir trabajando en ello.
Pero bueno, no me enrollo más, como no se por donde empezar, empezaré contando mi infancia asta el día en el que ocurrió todo.Bueno, mi infancia no fue muy agradable, desde que nací mi padre había estado ausente, y mi madre.... Bueno, digamos que no tengo buenos recuerdos de ella, los únicos buenos que tengo son los recuerdos de mis abuelos, se que los quería mucho, a pesar de que no sabía cómo demostrarlo, y siento que nunca tuve el valor de sincerarme con ellos.
Mi relación con mi hermano tampoco fue muy buena, nos llevamos nueve años y desde que nació, mi vida empeoró mucho más, no entiendo porque mis padres, mis tíos y casi todo el mundo, querían a Castiel, pero no a mí. Nunca lo he entendido, bueno, en realidad si que lo entiendo, al fin y al cabo soy un monstruo, o al menos lo era, y se que no puedo echarle toda la culpa al maltrato, yo ya era malo, desde que nací nunca he sido un "santo", pero al menos según mis psicólogos y la criminóloga, esas cosas hicieron que tomara un camino aún peor.Recuerdo, como con diez años intenté matar a mi hermano, en ese entonces también era consciente de que el no tenía la culpa de lo que me pasaba, pero sinceramente no podía controlarme. Y un día entre por la noche a la habitación de mi hermano, y eche mata ratas en sus cereales, pero entonces entro mi abuela a darle las buenas noches y me quito el veneno de las manos, y antes de que me diera tiempo a mediar palabra, me respondió una de las cosas que menos me esperaba. Me dijo que que yo era bueno, y que no valia la pena cambiar, por lo que hacían los demás, poniendo mi inocencia en juego. Lo único que sabía que era mentira, era mi inocencia, yo no era inocente y no lo fui nunca, eso lo sé.
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El amor todo lo puede
RomanceDerio, es un chico joven que recuerda como despues de haber sido un asesino, pudo cambiar al conocer al amor de su vida.