❝ Donde JungKook es un alfa solitario con 3 cachorros y TaeHyung un niñero muy lindo. ❞
↬ Kook top, Tae bottom.
↬ Romance, omegaverse, m-preg, mommytae, soft, fluff.
↬ Mención de: minimoni, yeonbin.
↬ Adaptación autorizada.
↬ Obra original...
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JungKook podía ser un alfa que era respetado y temido en su trabajo por la forma tan imponente en que llegó a su puesto, siendo inteligente e ingenioso al saber cómo maniobrar a los accionistas, sus estrategias y la forma en que controlaba a sus empleados —siendo amable y caballeroso al mismo tiempo que era imponente y firme—, era un alfa hecho y derecho, formado por su padre, que estaba obsesionado con la idea de un JungKook fuerte y calculador que pudiese tener una familia que continuara con el legado Jeon.
A pesar de ser todo eso, JungKook era una especie de alfa empalagoso; le gustaba mimar a sus cachorros, hornear y hacer reír a sus amigos más cercanos con sus chistes absurdos y juegos de palabras ilógicos.
Muy en el fondo soñaba con encontrar al omega perfecto con el cual casarse, marcarlo y mimarlo todos los días, pero sabía que eso era imposible debido a su timidez para hablar con omegas atractivos o por el simple hecho de que ningún omega se emparejaría con un alfa con cachorros.
A pesar de saber que su misión de encontrar al omega perfecto ya había parado al conocer a TaeHyung, se cruzó otro impedimento.
TaeHyung era su empleado y no sabía cómo hablar de su enamoramiento con él sin ser inoportuno. No quería que el omega se ofendiera y decidiera irse cuando sus cachorros lo adoran. No soportaría ver a sus cachorros sentirse abandonados.
Sumándole a su timidez, el hecho de que TaeHyung era su empleado, y el miedo a ser rechazado, es que el omega ya estaba en una relación.
Ese doctor de cabello dorado y con ricitos perfectos logró que el omega aceptara ser su novio.
El alfa de JungKook gruñó y aulló triste al ver al omega llegar con una cadena de oro delgada colgando en su delicado cuello y un ramo de rosas juntas por un lazo negro.
TaeHyung contó la historia, emocionado, con sus mejillas sonrojadas y una brillante sonrisa en su rostro.
Sunoo escuchaba la historia con un puchero en su rostro, YeonJun estaba desconfiado del alfa nuevo de su mamá y JungKook... JungKook quería correr a su cuarto y llorar, especialmente porque ese brillo especial en la mirada de TaeHyung no se encontraba.
Tal vez tenía una gran sonrisa en su rostro, pero faltaba ese lindo brillo en esos océanos profundos.
Habían pasado unos meses y TaeHyung se veía triste a menudo.
Llegaba a casa triste o avergonzado, evitaba conversar con JungKook, quien siempre lo esperaba, y al despertar al día siguiente se veía feliz solamente cuando estaba con los cachorros.
— ¿Sucede algo, Tae?
JungKook llamó la atención de TaeHyung, quien saltó en su lugar al ver la mano de JungKook acercarse a su hombro.
Gimoteó un poco en silencio.
— N-No, y-yo solo estaba un poco distraído. El cumpleaños de Soo es pronto y su fiesta necesita muchas preparaciones, ya sabes — TaeHyung rio nervioso y JungKook lo vio desconfiado.
