CAPITULO 4

1.3K 90 1
                                    

Al dia siguiente, el Joker observó con asombro el jacuzzi que había descubierto en la mansión de Bruce Wayne mientras caminaba por los pasillos. "¡En serio, Batsy? ¡Me ocultaste esto todo este tiempo! ¡Qué cruel eres!" exclamó mientras hacía un puchero y fingía estar indignado. La reacción del Joker sorprendió a Batman, quien no pudo evitar sentirse ligeramente conmovido por la expresión infantil del villano.

"Mira, no es gran cosa", respondió Batman tratando de restar importancia al asunto. Sin embargo, en su interior, se sentía extrañamente satisfecho por haber logrado sorprender al Joker de esa manera.

El Joker, sin esperar una respuesta de Batman, se desnudó por completo y se lanzó al jacuzzi con un gran chapuzón, salpicando agua por todas partes. Bruce se tapó los ojos instintivamente, sintiéndose incómodo ante la repentina desnudez del Joker.

"Betsy, ¿no me digas que estás avergonzado?" preguntó el Joker con una sonrisa traviesa. "Ya viste todo antes. Solo ven a divertirte conmigo y no seas aguafiestas".

Bruce se quitó las manos de los ojos y miró al Joker con una mezcla de incredulidad y resignación. Sabía que no podía resistirse al encanto del Joker por mucho tiempo, así que decidió unirse a él en el jacuzzi.

"Está bien, solo por un rato", murmuró Bruce mientras se quitaba la ropa y se sumergía en el agua caliente del jacuzzi. El Joker sonrió triunfante mientras observaba a Batman unirse a él en la piscina.

Durante un tiempo, los dos enemigos mortales disfrutaron de la relajante sensación del agua caliente, intercambiando bromas y chistes sarcásticos como si fueran viejos amigos. Para Bruce, era extraño sentirse tan cómodo en presencia del Joker, pero al mismo tiempo, era difícil negar la conexión que existía entre ellos.

El ambiente del jacuzzi se volvió más sereno mientras Bruce y el Joker compartían ese momento de intimidad inusual entre enemigos. Sin embargo, la curiosidad de Bruce sobre las cicatrices del Joker no podía ser ignorada por mucho tiempo.

"Bueno, J" comenzó Bruce, usando el apodo que a veces le daba al Joker para burlarse de él, "he estado pensando... ¿Cómo te hiciste todas esas cicatrices? Hay tantas y cada una parece contar una historia diferente".

El Joker dejó escapar una risa áspera y se recostó más cómodamente en el jacuzzi, el vapor del agua envolviéndolo como un manto. "Oh, Batsy, siempre tan curioso", respondió con una sonrisa siniestra. "Pero estás en lo correcto, cada cicatriz tiene su propia historia. ¿Quieres que te cuente una o prefieres descubrirlo por ti mismo?"

Bruce se sumergió en sus pensamientos por un momento, evaluando la situación. Sabía que el Joker era impredecible y que podría estar jugando con él, pero su curiosidad era más fuerte. "Prefiero que me lo cuentes tú", dijo finalmente, mirando fijamente al Joker con determinación.

El Joker asintió con aprobación y comenzó a relatar sus experiencias, cada palabra cargada de un aura de locura y peligro.

"Verás, Batsy, estas cicatrices...", comenzó el Joker, señalando algunas de las marcas en su cuerpo, "son el resultado de una vida llena de caos y desesperación desde que era niño. Algunas las recibí en peleas callejeras cuando era solo un niño tratando de sobrevivir en las calles de Ciudad Gotham. Otras son el recuerdo de encuentros con la policía y otros villanos que no apreciaban mi sentido del humor".

Bruce escuchaba atentamente, asimilando cada palabra del Joker. Aunque sabía que no podía confiar plenamente en lo que decía, no podía evitar sentir simpatía por el hombre detrás del caos.

"Aunque, la verdad, Batsy," continuó el Joker con un brillo malicioso en los ojos, "algunas de estas cicatrices son autogestionadas. ¿Qué puedo decir? A veces me gusta jugar con cuchillos".

Bruce frunció el ceño ante la revelación, sintiendo un escalofrío recorrer su espina dorsal. Sabía que el Joker era capaz de cualquier cosa, pero escucharlo admitir que se autolesionaba fue perturbador.

El Joker rió ante la reacción de Batman, disfrutando del desconcierto que causaba en su enemigo. "Pero no te preocupes, Batsy", dijo con una sonrisa retorcida. "No todas las cicatrices son físicas. Algunas son mucho más profundas que eso".

Bruce asintió en silencio, sintiendo un peso pesado en su pecho mientras reflexionaba sobre las palabras del Joker. Sabía que el pasado del villano estaba lleno de dolor y sufrimiento, pero nunca había imaginado la extensión de su tormento interno.

Mientras el jacuzzi continuaba burbujeando a su alrededor, Bruce y el Joker compartieron un momento de complicidad inusual, cada uno sumergido en sus propios pensamientos y reflexiones sobre las cicatrices que marcaban sus vidas de maneras que ni siquiera podían comenzar a comprender.

Batman × Joker (Boyslove)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora