Fujin x Lectora [Mortal Kombat]

"Capítulo 14"

Despertaste después de haber tenido una gran noche, eran casi las 11 am lo que significaba que habías dormido un poco más de lo que hacías todos los días.

Estabas sola en tu habitación, pensaste que todo había sido un buen sueño pero todo fue verdad, tal vez Fujin tenía otras cosas que atender, además de ti.
Te levantaste y tomaste un baño rápidamente, saliste a buscar a Kung Lao ya que te sentías mejor para ir con ellos en la noche. Aún estabas cansada pero nada fuera de lo normal.

Después de todo, podrías salir sin que ALGUIEN pudiera detenerte, para suerte tuya no había mucho sol, estaba fresco pero no muy frío, un clima bastante agradable.

Ibas a salir pero viste a Fujin hablando con Raiden así que cerraste la puerta silenciosa y rápidamente.

— Maldición, ya déjenme salir.—sonaste enojada golpeando repetidas veces tu frente.

Estabas arta de estar tanto tiempo en tu habitación, romper las reglas no oficiales de Fujin mientras estaba contigo sonaba interesante. Viste la ventana y no pudiste evitar sonreír un tanto, aunque le pensaste.

— ¿De que estarán hablando?.—miraste la ventana.— No creo que pase algo si me salgo..

Estabas demasiado cerca de la ventana hasta que oíste tu puerta abrir.

Fujin: Quieres salir, ¿verdad?—se acercó a ti.

— No me quedaré demasiado tiempo aquí, ya estoy mejor.—cruzaste tus brazos.

Fujin: Está bien, salgamos.—tomó tu mano para después salir.

— Ya olías a secuestrador.—aguantaste tu risa a lo cual Fujin solo sonrió.

Dirías que si no hubiera pasado lo de anoche, no estaría de muy buen humor.

— ¿Podemos ir a la aldea?—tomaste su brazo en forma de suplica.

Fujin: Bien, si te sientes mal solo dímelo, ¿está bien?

— Claroo, vamos por un lazo.—sonreíste para después dirigirse a el lugar.

Mientras estaban en aquel lugar, vieron que era una aldea muy hermosa además de tener gente generosa.
Después de haber comprado el lazo, habían visto personas nuevas y la experiencia de conocer más cosas, hasta que Fujin y tú pasaban por un puesto de una anciana no tan anciana.

Anciana: Linda joven, ¿él es tu prometido?

— Pronto lo será.—sonreíste para después guiñarle el ojo a Fujin.

Anciana: Seguro que tendrán hijos fuertes, toma esta flor.—sonriendo le entregó un tulipán amarillo, dando a dar un significado de alegría.

— ¡Muchas gracias!.—miraste contenta admirando la flor por unos segundos.

Fujin: Señora An, ¿cuánto debería darle?.—preguntó amablemente.

Señora An: No es nada para el Dios del viento y su futura prometida.—hizo una reverencia ante él.

Fujin: Le agradezco mucho, le aseguro que en poco tiempo estaremos aún más juntos.—se retiraron felizmente.