12 O'clock: A través del tiempo [PAUSADA]

0.8 ¿¡Qué!?

Cristal

Me adentre a la oficina bajo la atenta mirada de aquellos dos hombres.

—En que puedo servirles Majestades

—En muchas cosas — interrumpe Belial se a lo que se refiere pero prefiero darle con el látigo de la indiferencia.

—Queríamos explicarte sobre tu estadía aquí como cuidadora, eso es lo que serás a la vista de todos — comienza a hablar Axel relajado

Claro y que seria su amante

—Me quedan aproximadamente 3 meses aquí, Majestades no se tienen que preocupar por eso

—Como sabes que te irás en ese tiempo — vuelve a hablar Belial

—El reloj me lo motro unos números antes, 3 meses y podré regresar a mi época — explico para tomar asiento frente al escritorio — pero aunque pueda regresar a mi época no volveré o tratare — sentencie — hasta que sus hijos no cumplan 5 años — les dije para así cerrar el tema.

—¿A que se debe que no quieras regresar hasta esa fecha? — pregunta ahora el rubio se le nota en la mirada tiene curiosidad por el motivo, no le daré el gusto de oír lo que quiere.

—Se los prometí a ellos eso es todo — dije para dar el tema por concluido

—En una semana habrá un gran banquete en honor a el nacimiento de los príncipes tienes que estar presente para ellos — dice Axel con una mirada retadora por no decirle lo que quería oír.

—Está bien de todas formas es mi trabajo — dije de forma aburrida

—Eso es todo, me puedo retirar — insinuó poniéndome de pie y caminando hacia la puerta queriendo salir de aquel lugar lo antes posible

—Hay otra cosa — comenta el pelinegro acercándose demaciado a mi, no retrocedo aunque la oferta estuvo tentadora.

—Castaña tenemos que explicarte algo — dice tranquilo

—No me llames así

—Como quieras castaña — ruedo los ojos ante su actitud, parece un crío

—Aunque no me guste admitirlo, no me perteneces — declaró Axel de repente

Los mire a ambos, Belial estaba justo en frente de mi y el rubio estaba detrás de mi, cerca, muy cerca para mi gusto.

—Nos perteneces a ambos — sentencio el pelinegro con una sonrisa en su rostro

Me les quedé viendo con cara de WTF que acaban de decir.

—¿¡Q-que!? — logre articular palabra

—Nos perteneces Cristal hasta el final de tus días serás nuestra, solo nuestra, tus lágrimas, tus sonrisas, tus temores son solo nuestros — dijo Axel acercándose más a mi — si me entero que otro está tocando lo que es nuestro — ambos me miran muy serios — lo mataremos, creeme que cuando se trata de asesinar y tener sexo somos muy creativos — dice con una sonrisa torcida en su rotro, mientras un escalofrío recorría mi espina dorsal.

Trato de huir pero es inútil Belial me sostiene el brazo mientras que Axel se posiciona detrás de mi nuevamente.

—Mierda — susurro

—No creas que escaparas de nostros — anuncia el pelinegro mientras me jala hacia ellos — es un poco tarde para arrepentirce no lo cres, castaña

—¡¿No pueden simplemente dejarme en paz?!, dios, ¡están casados, tienen hijos!, es simple, ¡dejenme tranquila! — suelto sin contenerlo más