Through Time [PAUSADA]

23. Repitelo

Kristal

—Repitelo — ordena

—Pare... — no pude terminar la oración cuando unió nuestros labios con rudeza, su lengua entrando rápidamente en mi boca danzando junto a la mía, paso mis manos sobre sus hombros para después tomar sus cabellos entre mis manos, el gruño contra mis labios, muerde mi labio provocando una pequeña herida la cual es succiona, separamos nuestros labios

Lo miro fijamente sus labios un poco rojos e hinchados, su negro cabello revuelto, su respiración un poco agitada.

—Te dejaré dormir — se aleja de y va hasta la puerta después para desaparecer

Como pretende que duerma despues de ese maldito beso

—¡Aaahhh! — exclame

Me levanto de mis cómodas sábanas, voy hasta el baño, me despojo de la ropa y entro a la regadera el agua fría recorriendome el cuerpo así estoy unos 20 minutos, necesitaba relajarme, también quitarme el sueño

Salgo envuelta en una toalla y voy directamente hacia el vestidor en busca de  que ponerme

El silencio de la habitación siendo interrumpido por un carraspeo, rápidamente me volteo para encontrarlo sentado en la cama.

—¿¡Que carajos!? — suelto un poco sobresaltada, sostengo fuerte la toalla que cubre mí cuerpo

—¿Que pasa ahora? — le pregunto exasperada al pelinegro que se encuentra muy relajado mirándome de arriba a abajo

—En mi defensa, toque la puerta — se defiende

—Me lo había llevado — dijo mientras que mi reloj se encuentra colgando de su mano

—Bueno ya me lo entregaste ¿puedes irte?

—¿Porque debería?

Aquí vamos de nuevo, paciencia Kristal

—¿No lo sé?, talvez porque está es mi habitación y estoy desnuda, puede ser por eso

—Talvez

—Me tengo que vestir — le informo

—¿Y que quieres? que te ponga la ropa — insinua

—¡Claro que no!, quiero que te vayas

Este hombre me saca de mis casillas

Su mirada fijada en mis piernas, cabe resaltar que la maldita toalla casi no cubre mi trasero

—¡Hey! — llamo su atención, su mirada choca con la mía

—Mi rostro está aquí — señalo mi cara

—Perdoname castaña tienes unas piernas muy hermosas — sonríe con picardía

Siento mis mejillas arder ante aquellas palabras me volteo bajando un poco la toalla para que cubra más terreno

—¿Que paso castaña? — insinua burlón por mi reacción

—Puedes salir de la habitación por favor — volteo de nuevo dirigiedole la mirada

El pelinegro se levanta de la cama y camina hacia mi por instinto retrocedo hasta chocar con el estante, el sigue acercándose, aprieto fuerte el agarre de la toalla

El extiende su mano hasta colocar el reloj de nuevo en su lugar

Su electrizante mirada compitiendo con la mía

Separa su cuerpo y va hasta la puerta

—Nos vemos después — dijo sin volterce para después salir de la habitación dando un pequeño portazo

*****

Ya vestida y arreglada salgo de esas cuatro paredes en busca de Fátima, muero de hambre, voy hacia la cocina y allí se encuentra haciendo sus tareas.

—Fátima — le llamo

—¿Si?

—¿Hay algo de desayuno para mi?

—Claro que si

Su mirada va hasta mi rostro

—Pero, y esa cara ¿no dormiste bien anoche cielo?

—Me quedé la noche leyendo un libro — suelto una risita tonta

—Pareces mujer divorciada — bromea sonriendo, sonrió también, desdes hace unas semanas tengo mucha más confianza con ella

—Ven que te sirvo el desayuno

Rato después de desayunar voy hacia el jardín, Fátima me dijo que los niños se encuentra allí junto a Liz

—¡Kris! — se escucha decir a los pequeños un poco lejos aún de mí

—Niños, ¿que han estado haciendo? — pregunto sonriente

—Jugando ¡vamos! — me toman de las manos y me arrastran hasta donde estaban instantes antes

—Señorita — Liz se pone de pie y me ofrece una breve reverencia

—No hagas eso Liz, no hace falta — le digo cuando toma asiento a mí lado

—Y llámame Kristal ¿si? — dije con una sonrisa en mis labios

—Esta bien Kristal — ambas sonreímos

Nos encontramos sentadas en el césped, viendo los niños corretear, me contó que en su tiempo libre le gusta venir a este lugar le trae tranquilidad, también me conto un poco sobre ella, su familia es pobre y ella desde pequeña tuvo que trabajar duro para buscar que comer y al tener una oportunidad en el palacio estaba muy feliz ya que porfin iba a tener un trabajo estable y de buen sueldo, así seguimos hablando de temas triviales, cosas sin sentido, hasta que tuvo que marcharse porque su tiempo libre había terminado

La verdad es que me agrada mucho

También hubo un tema que toque con ella, sobre Connor, no sabía si ella sabía algo de su repentina ida, o siquiera lo conocía, toque el tema por "casualidad", me dijo que habían rumores sobre que algunas sirvientas lo vieron antes de marcharse, estaba todo golpeado

Los niños se encutran en la cocina, resultaba ser que las clases son mañana y no hoy

Mí cabeza no para de pensar

«—Si se entera la tendremos fea— »

Lo que dijo Belial...

«—El que la tendrá fea será el —»

A lo que se referia Axel era a... ¿Connor?

Seguro que no Connor es su primo no podría hacerle nada

También está Belial el es más tranquilo no permitiría tal cosa, bueno tranquilo no es la palabra, el punto es que no dejaría que pasara tal cosa, ¿no?

—¡Kristal! — grita alguien a mi lado doy un brinco en mi lugar, es Rian

—Cariño ¿que pasa? — pregunto

—Te estábamos llamando pero no respondías — interrumpe Alex

—¿De verdad?

—Ya es tarde te estábamos buscando

—¿Tarde? — miro a mi alrededor el sol casi se había ocultando por completo

—Bueno, entonces, ¿para que me buscaban? — les pregunto

—¡Vamos a jugar en mi habitación!, ¿siii? ¡ven con nosotros! — exclama Rian

—¿Todavia tienen tanta energía? — dije entre risas

—¡Claro que siii! — dijeron juntos

—Entonces vamos — me levanto del césped estirandome en el proceso

—¡Vamos! — exclamo Alex empezando a correr

—¡Espérame! — le grita Rían corriendo detrás de el

Al llegar al cuarto de Rían me siento en la cama mientras que ellos ya se encontraban causando desastres dentro de aquella habitación

Me acuesto en el colchón, estaba tan cómodo, entre el ruido y las risas de los niños caigo en un profundo sueño