𝚇𝚇𝚅𝙸𝙸

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Desde que Mictia Volvió de Venezuela, para continuar sus estudios en México, Pasaba todo el tiempo con Soarinng, iban a casi las mismas clases, pasaban el día en la habitación de Mictia o la de Soa y se la pasaban riendo, definitivamente eran unos amigos inseparables, para lo único que se separaban era para ir al baño, o para dormir. Aunque a veces hacían pijamadas y al despertar Mictia se iba a su habitación para cambiarse y de allí se iban a la universidad con Natalan, de ahí también se la pasaban todos los recesos juntos.

Nat, por esta situación se Sentía ligeramente solo, solía pasar todo el día con Soa, o con Lucasta cuando estaba en casa, pero desde que llegaron los nuevos integrantes ya no se sentía igual. Lucasta pasaba todo el día con Michu, Cejo con Locochon, Aquino con Duxo y bueno, Soarinng con Mictia.
Gracias a esto, empezó a salir más de casa, se reunía con sus amigos de la universidad, comenzaba a llegar más tarde a la casa, a veces llegaba temprano, pero un poco borracho por lo que no cenaba con los demás y se iba directamente a su habitación a dormir. Esto empezaba a llamarles la atención a los chicos de la casa. A veces despertaba de mal humor y no le dirigía la palabra a nadie hasta que volviera de su salida con amigos o la universidad, a veces ni lo hacía.

Su alimentación empezaba a empeorar, paso casi un día entero sin comer, solo había probado la cena. Empezó a juntarse con los "populares" o los más guapos de la universidad, pasándola con chicas a su lado, ignorando por completo a Soa y a Mictia en esta.
Un día, Soa estaba almorzando algo con Mictia atrás de uno de los edificios de la universidad, hasta que se escucharon unos "¡Uhh!" O "¡Vamos!", fueron a ver de qué se trataba el alboroto y allí se encontraba una fila de chicas y chicos viendo a Natalan y a una de las chicas más lindas de la universidad, la chica se estaba declarando a Natalan, se veía tímida, pero simplemente Natalan no mostraba ninguna reacción, más bien se mostraba serio y un poco disgustado.

— Yo... Me gustaría que fueras mi pareja, Natalan — Dijo la chica parada en frente de Nat, siendo apoyada por sus amigas quienes veían expectantes de la respuesta de Natalan, junto a los amigos de este, quienes pensaban que iban a aceptarle.

— ¿Acaso crees que estamos en primaria? Déjate de estupideces y ponte a estudiar, no estás aquí para conseguir novio. — Todos se quedaron callados, sorprendidos de la respuesta tan cruel y seca de Natalan, quién miro para un lado, disgustado de la confesión de la chica. 
— Para ser sincero, ni siquiera me pareces una persona atractiva, no eres amable y no eres una persona de la cual estaría seguro de que me sería fiel. — Se acerco a la chica y la agarró del mentón, muy cerca de su cara. — Además... ¿No estuviste con toda la universidad...? Ridículo.

En ese momento los ojos de Natalan se cruzaron con los de Soarinng y le dio una sonrisa coqueta a la chica y aprovechando en la pose que estaba con esta, le dio un pico y le dio unas palmas en la cabeza, generando una rabia pasar con lentitud sobre el cuerpo de Soarinng, lo había puesto celoso.

— Es muy infantil. Ugh. — Le dijo a Mictia mientras se enojaba al recordar como actúo con la chica al verlo a él.

— Bueno... Él tiene derecho a hacer lo que quiera, al final se le declararon a él, igualmente fue muy cruel con esa pobre chica. — Dijo Mictia mientras comía viendo a su amigo morderse el labio de el enojo.

En eso Natalan apareció de la nada, saludando a Mictia con la mano, Poniendo uno de sus dedos en su boca, para que no le dijera a Soarinng de que estaba ahí, quería escuchar lo que opinaba el sobre lo que sentía, Mictia acepto con una sonrisa, sabía que se iba a arrepentir de eso luego.

— ¡Además...! Agh. ¿Viste cómo ha llegado a casa estos últimos días desde que llegaste? ¡El no hacía eso! Me enoja tanto...seguro estaba con esa chica que se le declaro, es obvio... — Se tapó la cara y pronto escucho unos pasos a su izquierda, que llegaron hasta enfrente suyo.

Cuando se destapó la cara tenía unos ojos cristalinos y adelante de él estaba Natalan agachado, viendo a Soa con una cara sonriente, no la juguetona que siempre tenía, era una más de un tipo de felicidad, vergüenza y pena mezcladas, Soarinng se había sonrojado a un punto donde había llegado hasta sus orejas y miraba a Mictia severamente enojado de que no le hubiera avisado que Natalan estaba ahí.

— ¿Estabas celoso...? — Preguntó Natalan viendo a Soarinng con unos ojos con un claro enamoramiento en ellos, posó su mano en la mejilla de Soa sin apartar su mirada de la cara de Soarinng.

Soa lo miro expectante y en eso, los labios de Natalan rozados con los de Soarinng, le dio un tierno beso, al alejarse Soarinng lo miro, deseando otro más, pero su enojo volvió al recordar como Natalan beso a la chica, y se "Limpio" los labios con la manga de su sudadera amarilla, poniendo un poco triste a Natalan, pero se sentó con las piernas cruzadas, abrió sus brazos con una caria de pena que sabía que Soarinng no soportaba y en eso Soarinng tímidamente lo abrazo lentamente, cerrando sus ojos en cuanto su cara se apoyó en el pecho de Natalan.

— Te quiero... — Dijo Soarinng sin pensarlo, desde que Natalan no iba a su habitación a desearle buenas noches empezó a abrazar su almohada, imaginando que era él.

— Te amo, Soarinng... — Natalan le respondió, recostando su cabeza en la cabeza de Soarinng mientras lo abrazaba.

A Mictia casi que se le salían las lágrimas por esa linda escena, estaba conmovida por las palabras de Nat y Soa.


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❀⌜𝑬𝒏 𝒖𝒏 𝒎𝒊𝒔𝒎𝒐 𝒍𝒖𝒈𝒂𝒓⌝❀ (Lucarinng // Natarinng) [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora