Al fin en Orario

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CAPITULO 10

Hacia un poco de calor, los movimientos del barco hacían que algunos tripulantes se sintieran mareados, aunque el tiempo era bueno para navegar no significaba que la pasarían bien en el viaje.

Nuestro grupo de protagonistas iban en sus propios camarotes, ya estaban por llegar a tierra firme, y pues... al fin llegar a Orario, después de sus viajes fallidos hacia este.

-Si, al fin cerca de Orario, no puedo creer que al fin estemos ahora si seguros de llegar. _Haruhime sonaba feliz.

-Si bueno, tienes razón, creí que nunca llegaríamos a Orario con lo sucedido, tal vez nos desviariamos del camino nuevamente. _con las desviaciones repentinas (en parte también por la mala orientación de Bell, de hecho fue un error darle a el el mapa), Tiona estaba segura de que tal vez nunca hubieran llegado a Orario.

-Y también por el ofrecimiento del emperador Shao, quien lo diría Bell, ser casi comprometido con la princesa y en un futuro ser el emperador de China. _Hestia recordó lo que había pasado en el palacio del emperador después de la guerra con los TaoTei.

Bell solo suspiro recordando también aquella situación vergonzosa en la que se había metido.

Ya habían salido del barco e iban escoltados, cortesía del nuevo emperador de China, estaban en deuda con ellos y la mínima manera de pagarselos era con una pequeña escolta, y bueno al decir lo mínimo, era un poco mentira, pues se podría decir que era lo mínimo de lo mínimo, comparado con lo que quería darles el emperador Shao.

Flash back

Luego de votar al ex-emperador y por supuesto coronar al nuevo emperador, al ser Bell el héroe que salvo a China tenía que ser recompensado y como el ex-general estaba muy agradecido, tanto como pelear por la Orden sin Nombre, defender la muralla y salvar China de los temibles TaoTei, era obvio que la recompensa tenía que ser grande.

En ese momento Bell, Haruhime, Tiona y Hestia estaban frente a él nuevo emperador el cual yacía sentado en su trono y a su lado la nueva princesa Lin.

-Bell Cranel, benefactor y salvador de China, guerrero fiero que nos ha ayudado en esta larga batalla, que os gustaría por recompensa, gracias a su gran cooperación claro que será una muy grande, dime, quieres oro, ser gobernador o... la mano de la princesa Lin. _al decir eso la susodicha se había sonrojado y su mirada se fue hacia el suelo sin tener el valor de voltear hacia Bell, por parte de Haruhime, Tiona y Hestia estas estaban en shock.

-Espere, espere, ¿usted quiere comprometer a Bell?. _dijo Haruhime saliendo del shock.

-Pues si, verán, por como conozco a Bell, se que este sería un buen esposo para la princesa Lin y en un futuro buen emperador de esta nación, y como estamos endeudados con el pense que podría ser una manera de pagarle.

-Pero no creo que Bell quiera eso, ¿verdad Bell?. _lo último lo dijeron mirando hacia Bell con unas sonrisas... muy dulces, demasiado dulces.

Bell temiendo por su vida y también siendo el humilde empezó a hablar.

-Señor emperador, no es necesario tanta gentileza. _al decir eso se pudo ver como el mundo imaginario de la princesa Lin se cayo y se escucho el ruido de algo romperse. -¿eh?, ¿alguien escucho ese crujido?, pero bueno lo que quiero decir es que por ahora quisiera ir a Orario para ser un aventurero. _lo que decía era verdad (además de no querer poner su vida en riesgo).

-Pero aún así estamos en deuda contigo.

-Tengo una idea señor emperador, ya se como puede pagarnos.

Fin flash back

Ya estaban llegando hacia Orario, las carretas eran mejores que los barcos pero en fin, tenían una buena cantidad de dinero y armas de buena calidad además de ya casi llegar a las puertas.

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