Capítulo 1

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Circos.

A menos de que se padezca algún miedo a los payasos, los circos son un lugar lleno de diversión y risas.

Este circo en cuestión se destaca del resto, este circo prácticamente ponía tu mente y tus sentidos en un plano digital colorido y chistoson.

O bueno; esa es la impresión que los artistas cirqueros del lugar le dan al público casi todo parecía sacado de un casco de realidad virtual y los actos igualmente eran muy diferentes e innovadores los unos de los otros. No obstante, lo más resaltante de dicho circo eran los artistas tan diferentes del resto.

Casi se podría decir que era un show de fenómenos... Un poco perturbador a decir verdad.

Aún así con todas las diferencias tan remarcables era admirable lo bien que trabajaban en conjunto y se trataban entre ellos, tenían sus defectos como todos; pero a fin de cuentas casi parecían una familia.

Y está inusual familia estaba de gira, así es, bienvenidos ¡Al Asombroso Circo Digital!

Las mayores (y más brillantes) estrellas estaban tomando un merecido descanso de tanto show y hacer tonterías para poder estar listos para el viaje a su próximo destino. Los nombres de esos grandes cirqueros son:

Jax, el conejo acróbata.
Ragatha, la equilibrista.
Gangle, la bailarina de listones.
Koufmo, el payaso.
Kinger, el corredor ecuestre.
Zooble, la escapista.

Estos colegas cirqueros siempre estaban a disposición de dar un show inolvidable para su querida y bella audiencia y siempre a las órdenes de su maestro de ceremonias Caine y su asistente Bubble.

Los artistas se encontraban en la ya vacía zona de entretenimiento jugando con algunas cosas que estaban ahí, les habían dicho que se pusieran con la limpieza de la zona del público pero primero querían divertirse.

Al fin y al cabo, divertir a los demás no es fácil y ellos podían torcer las reglas si así lo querían. El conejo antropomorfico y la muñeca de trapo estaban en el medio de la pista de circo. La de cabellos rojos suspiró a medida que cerraba su sombrilla.

Ragatha: para ser el último show no nos fue nada mal con la venta de los juguetes con luces

Jax: *sentado en una pelota* te dije que hacer a Gangle bailar y al caballo de Kinger llevarlos puestos era una gran idea de marketing

Ragatha: y ahora Kinger te odia un poco más por cierto

Jax: ¿Me importa?

Ragatha: me sigo preguntando porque me junto contigo *facepalm* ¿No has visto a Koufmo?

Jax: yo que voy a saber, solo lo ví irse a su camerino porque no volvió ni para decirle adiós al público

Ragatha: seguro solamente está cansado, ser payaso no es fácil... También las personas felices son las que más sufren en secreto

Jax: *resopla* ya empezó la psicóloga

Ragatha: pues disculpa, porque me importe lo que los demás sientan hijo de la gran *censura*

Jax: *censura* muñeca de trapo

Ragatha: en fin, descansamos un rato más y luego empezamos a ordenar los asientos y a ver qué cosas olvidaron los visitantes

Jax: tienes una rara obsesión con coleccionar objetos perdidos

Ragatha: y tú tienes una rara obsesión con los mortales triples hacia atrás, estamos a mano

Jax: hey, eso es aparte; lo hago por aplausos extra *pliega las orejas hacia atrás*

Ragatha: te vas a terminar matando un día de estos, por algo Caine casi no te deja usar los trapecios

Los primeros pasos en la comedia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora