Lo Retorcere Todo.

Capitulo 5

Lo cierto es que, ver a este par de pelirrojas calientes intentar llamar mi atención es divertido. Es fácil de ver que no son la clase de mujer de la cual deberías enamorarte.

Solo follarlas no seria tan interesante. Debía ser un poco diferente.

Al llegar a la habitación de invitados, se desnudaron mientras se paseaban bailando y tocandose. Verlas besarse entre sí, desnudas mientras me miran, era entretenido.

Estaba duro. Solo había disparado una vez, y hacía tiempo que no lo hacía, por ello aun quedaba mucho en mi.

Sin embargo con mi nueva resistencia no seria fácil estar completamente satisfecho.

Por ello decidí que si quería que cumplan con sus palabras, debía cambiar un par de cosas.

"Escuchen ambas." Hable para que se detuvieran y me miraran. Sonreían con picardia.

"Prometieron cosas. Y para cumplirlas deberán ser mis juguetes. Las usaré solo para eyacular. Entendieron?" Hice una pequeña prueba.

Mire sus reacciones y mi sospecha se confirmó instantáneamente. Ambas estaban aún más exitadas.

Sus puntos débiles estaban brillando fuertemente.

"Las maltratare. Y posiblemente se rompan. Pero de esta habitación, ninguna de las dos se va sin haberme satisfecho." Nuevamente sus ojos se enfocaron aún más en mi.

Podía verlo claramente. Lo que eran. Lo que se ocultaba debajo de su coquetería audaz.

"Dos zorritas pelirrojas que serán mis masturbadores. Tuvieron suerte de que hoy me fijará en sucias perras masoquistas como ustedes." Era eso.

Ambas abrieron aún más los ojos. Su agarre entre sí se hizo más fuerte y sus vaginas estaban más relucientes por la exitacion.

Estas dos pelirrojas, aún cuando hablaban y bromeaban  entre sí o con Kristen, no mostraban mucho más que el espíritu coqueto y sexy de una joven mujer.

Pero en cuanto hablaron conmigo cambiaron su actitud. Eran más audaz pero la insinuación era descaradamente clara. Casi demasiado.

Como si pidiesen ser usadas allí mismo. Ser degrada y maltratada por un hombre.

Ver como se exitan al ser insultados, al anunciar lo que les haría, al establecer el dominio claro, todo esto las exitaba aún más.

Eran unas masoquistas sumisa de manual.

Desnudandome y sentado en la cama hable nuevamente.

"Usen sus bocas, deben hacerme acabar en menos de 5 minutos. Si no lo logran..." solo las mire seriamente. Había un mensaje allí. La promesa de un castigo.

Se arrodillaron ambas, gateando y moviendo sus traseros no al lado del otro, llegaron hasta estar frente a mi pene y sin querer perder el tiempo se dedicaron a lamber absorber y masajear mis bolas y toda mi longitud.

Era una trampa, podía durar fácilmente 5 minutos. Sin embargo verlas esforzarse tanto mientras me atienden, me dio una idea. Para ello necesitaba cambiar un poco el juego.

"Al parecer no lo están haciendo muy bien. Ni siquiera pueden complacer un pene. Entonces tendré que cambiar un poco los términos." Hable esta vez buscando mi celular en el bañador a mi lado.

Jugué un poco con el y al final puse la cámara en grabación y se los mostré.

"Les daré a cada una tres minutos. Aquella que logre hacerme correr la recompensare."  Les dije mientras esta vez me acosté sobre la cama y puse mi celular a grabar.