La consecuencia indirecta de los festejos los en honor a Blancanieves fue una inmensa felicidad para el rey, quien quedó maravillado con las cualidades de su prima política. Pero para el resto del palacio las reacciones fueron muy diferentes. Los consejeros, nobles y cortesanos seguían desfilando con sus candidatas a reina, disgustados, sin embargo, porque el rey pasaba demasiado tiempo con la desconocida Roxelana. Mientras que la princesa experimentaba su primer ataque de celos y hacía cualquier cosa con tal de llamar la atención de su progenitor.
Del mismo modo, Ferdinand hacía de todo para llamar la atención de Roxelana. Incluso cuando no lo necesitaba, ya que era el soberano y la figura principal de las intrigas palaciegas.
Con tal de saber cómo conquistar el corazón de la lady sin títulos, Ferdinand consultaba con frecuencia a lord Boris para que le dijera lo que había averiguado en su casa y con su parentela. Boris se hacía de rogar un poco, puesto que debía mantener el cuento de la institutriz, aunque no demoró mucho en escupir la sopa. El rey realizó su cortejo invitando a la rubia a recorrer los jardines reales, a pasear en caballo por las tierras de la Corona, y a visitar el poblado más cercano para hacer algunas obras de beneficencia.
Los consejeros se dieron cuenta de que el rey ya tenía su elección a futura reina, aun sin anunciárselo a nadie, aunque eso no les impidió buscar razones para desprestigiar a la señorita, ni que las restantes damas solteras de la corte se siguieran pavoneando delante de él. Fue más obvio todavía que lo de la institutriz era una farsa cuando Blancanieves continuaba deambulando por el castillo, sin custodia y burlando incluso a los guardias.
Las respuestas al cortejo del rey parecían positivas, ya que Roxelana reía de sus chistes, le sostenía la conversación con gran interés y aceptaba los costosos regalos. Pero ella era muy discreta en cuanto a sus expresiones y a compartir cualquier detalle personal, incluso cuando las otras damas de la corte la presionaban con artimañas para conocer lo que hablaba o hacía en sus audiencias privadas con el rey. Privadas a plena vista, por supuesto. Ella no tenía intenciones de que se levantara ningún tipo de rumor que arruinara su reputación e hiciera peligrar su puesto en la enseñanza de la princesa, como bien fue advertida por lord Boris.
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Blancanieves, la Princesa Maldita (ONC 2024)
Vampire⚠️SINOPSIS EN CONSTRUCCIÓN⚠️ La princesa ha estado alejada del palacio por varios años ya. Mientras tanto, su madrastra se ha ocupado de la política del reino satisfactoriamente, pero guarda el pronóstico de la princesa con celosía. Se rumorea que...