𝐒𝐄𝐀𝐓𝐓𝐋𝐄 ; 𝐄𝐂𝐋𝐈𝐏𝐒𝐄

chapter three

chapter three: el regreso de Bella
or ha vuelto de Florida humana y pálida, en su línea
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DESPUÉS DE AQUEL FIN DE SEMANA sin su melliza torpe ni su cuñado de Transilvania, todo había vuelto a la normalidad con su regreso, es decir, Beth en el asiento trasero del coche de Edward quejándose por cualquier cosa.

Edward miró a la menor por el retrovisor, la rubia olía a perro, una mezcla de su perfume de Dior y el aroma de Embry, que debía admitir, no resultaba del todo desagradable.

Además, Edward comenzaba a querer mucho a esa niña. Aunque al aparcar, toda esa felicidad desapareció, y deseó matar al individuo del parking.

-¿Si os pido que os quedéis en el coche lo haréis?-Edward miró a las mellizas.

El vampiro salió del coche y miró como las mellizas bajaban rápidamente.

Beth observó a Jake en el aparcamiento y frunció el ceño acercándose a él.

-Hola.-Saludó la menor.

-¿No estabais fuera de la ciudad?-Preguntó el lobo.

-Volvi hace unos días y Beth ni si quiera se fue.-Dijo Bella.

-Está comprobando si sigues siendo humana.-Dijo Edward sonrieron con sarcasmo.

-He venido a advertirte, como volváis a entrar en nuestro territorio...-

Jake miró al vampiro advirtiéndole.

-¿Espera qué?-

Bella estaba confusa, pero más lo estaba Beth, quién frunció el ceño, los Cullen en el territorio de los lobos, no lo entendía.

-¿Qué pasa aquí?-Preguntó Beth cruzándose de brazos.

-¿No se lo has dicho?-

-Déjalo ya Jacob.-Musitó enfadado Edward.

-¿Decirnos qué?-Preguntó Bella.

-Emmett y Paul tuvieron un mal entendido.-

Beth lo entendía, ambos tenían una personalidad que arrasaba. La rubia se giró y encontró a su mejor amiga analizando la situación desde lejos.

-Cuando terminéis el concurso de testosterona avisarme.-Dijo la menor alejándose.

Rosalie y Emmett sonrieron al ver como Beth casi corría hacia ellos con una sonrisa burlona en su rostro.

-¿Paul te pateó el culo, oso?-

Emmett frunció el ceño ante la acusación.

-¿Cómo te atreves?-Preguntó el chico llevándose una mano al pecho.

-Lo hizo, a medias, Paul es igual de chulo que él.-Admitió Rosalie con sinceridad.

Emmett gruñó en desacuerdo mientras Beth soltaba una carcajada.

-Lo sabía, pienso recordarte esto hasta el momento de mi funeral.-