DÍA 8. CELOS

243 16 1
                                    

──¿Quien era?

Shanks pregunta amablemente, Mihawk sabe que no hay nada de amabilidad en esas palabras.

──No lo se, la persona de la otra línea ni siquiera hablo.

Es sincero y vuelve a retomar su lectura que no dura mucho porque el libro es arrebatado de sus manos y unos ojos rojos es lo que obtiene a cambio.

──¿Quién era?── vuelve a preguntar el pelirrojo pero esta vez más amenazante casi violento ──Mihawk, ¿Quién era la persona de la otra línea?

──Ya te dije que no se── el pelinegro suspira por un segundo antes de que su cabello sea tomado y tirado con fuerza, si un gemido de dolor quiere escapar de sus labios no tarda en morder sus labios para amortiguar el sonido.

──¿¡Era tu amante, verdad!?── Akagami grita y su agarre se hace más brusco que tiene los ojos dorados cristalizados ──¿¡Cómo se llama!?, ¿¡Cuánto años tiene?!, ¿¡Dónde lo conociste!?

Mihawk no puede responder ninguna de esas preguntas porque Shank sigue preguntando a lo rápido y en un ataque de celos o ira lo termina por empujar de la cama, haciendo que su cabeza chocará con la mesita de noche.

Si quiere quejarse no lo hace, el dolor es fuerte y una vez que lleva su mano en la parte afectada puede sentir algo tibio.

Cuando trata de mirar nada es tan nítido, aún así sabe que es su sangre, sabe que el golpe le está causando una hemorragia.

[...]

Mihawk ya no sabe que número de veces está por ocurrirá la misma escena, por la más mínima interacción que tuviera con cualquier persona enfrente de los ojos de Shanks, es que lo está engañando o está buscando un buen polvo.

No importa que dijera, su piel siempre terminaría marcada por los celos de Shanks. Tampoco cuántas veces terminaría su relación porque Akagami regresaría arrepentido y pediría una última oportunidad con la promesa de cambiar.

──¿En que tanto piensas, Mi-Chan?── Shanks abraza más su cintura que le roba un grito ahogado

──E-en lo mucho que te amo── apenas dice con la voz ronca por la actividad anterior ──Y porqué estoy por cambiar mi número de teléfono.

──¿Por qué lo vas a cambiar?── el tono agresivo regresa y Mihawk no sabe que hacer ──¿Por qué lo harías?

──Para que n-no molesten más── responde agotado y por el dolor que está sintiendo en la cintura, la mano de Shanks está haciendo presión ──Solo tu tendrás mi número.

Shanks se relaja y abraza cariñosamente a su amante.

──Esta bien, por esta vez lo dejaré pasar.  Descansa, Mi-Chan.

[...]

──Mi-chan, deberías trabajar en casa de ahora en adelante── Akagami habla y Mihawk sabe que no es una sugerencia.

No hay forma de negociar que termina por dejar su taza de café a medio terminar. Pensando en escapar o llevar a un psicólogo a Shanks.

──¿Qué opinas Mihawk?

──Que trabajaré en casa de ahora en adelante, no tienes por qué preguntar── apenas habla el pelinegro para volver a tomar su café cargado.

──No es necesario, Mí── Shanks termina su desayuno y mira los ojos dorados ──Solo evita a las personas a tu alrededor.

──Prefiero no ir más, estaré bien acá── bien encerrado, bien golpeado y bien enamorado ──Y si puedes por favor, pasa a mi oficina a traer todas mis cosas.

Pide y se marcha a la biblioteca, ignorando que el pelirrojo lo sigue como un cachorro perdido.

[...]

──Mihawk, debemos cambiarnos de casa── el menor pide con una sonrisa forzada al ver a su esposo con un paquete que alguien mando y no se sabe su nombre.

──Bien, que sea en el campo── dice y deja la caja en la basura ──Y desaste de ese presente, no conozco a esta persona.

──¿No lo vas abrir?

──Ni siquiera tiene nombré, porque debería abrirlo. No me interesa── casi se queja de dolor al ver su tobillo morado por la caza de ayer ──Y pide comida rápida, no creo ser capaz de moverme con esta lesión.

Shanks mira todo el cuerpo del pelinegro y asiente feliz. Mihawk tiene todas sus marcas y es suficiente para apaciguar sus celos.

──Bien, hoy será día de pizza.

𝘼𝙉𝙂𝙎𝙏𝙍𝙐𝘼𝙍𝙔  |  𝙍𝙀𝘿𝙃𝘼𝙒𝙆  | 𝙊𝙋𝙇𝘼Donde viven las historias. Descúbrelo ahora