Capítulo 2

1.1K 123 15
                                    

Gema Lancaster

Las lágrimas caen por mis mejjillas mientrs la preocupación por mis hijos crece sobre todo por Ivy que es el vivo retrato de su padre.

Ivy es mi hija mayor es la bebé que tuve con Christopher claro que el nunca lo supo me entere que estaba embarazada despúes de su boda así que decidi no contarlo para evitar dramas.

Día a luz un mes antes que Rachel y mi embarazo lo olculte todo el tiempo gracias a Dios este casi nunca se noto podía tener siete meses y el vientre parecía de cuatro o cinco eso me preocupo pero la Doctora dijo que los embarazos son distintos y unos nisiquiera lo notan hasta que entran en labor de parto. 

Bratt me ayudo con todo desde el parto hasta hacer que alguien me ayude a cuidarla, me la pasaba en la mansión Lewis para poder hacer todo con ella desde amamantarla y jugar con ella esa fue la razón por la que traicione a los Morgan, Bratt me dijo que estariamos juntos el criaria a Ivy como su hija pero todo fue mentira.

El casarme con él fue mi castigo por haber condenado a dos niños inocentes a tener que huir con sus padre como fugitivos, al parecer por mi culpa Christopher y Rachel se perdieron los primeros momentos de sus hijos todo por mi estúpido miedo de que me quietn a Ivy.

Levanto la mirada al escuchar como abren la puerta por más que quiera salir es imposible ya me lástime las muñecas al intentarlo pero estoy acostumbrada al dolor.

— Vaya la primera dama desperto. — Ladra sacrcastico Chris. — No deseas algo más espero te guste tu suit.

— De hecho si me gustaria un café. — Detrás sale una mujer que me da una bofetada.

— Aquí eres una prisionera al Vor lo bebes respetar te puede quitar la vida en menos de un segundo.

— Que lo haga a ver si es tan hombre como dice.

Me vuelve a pegar al punto de romperme el labio el sabor metalico de la sangre lo siento en la lengua pero e tenido ese sabor tantas veces en mi boca que ya no me proboca nada.

— ¿Quiere que la castigue señor?

— Dejala tendra que hablar. — Me toma de las mejillas. — Por las buenas o por las malas.

— No me digas que me vas a hacer torturarme.

— No yo no mis hijos lo haran.

— Entonces traelos sera un placer que tomen venganza despúes de todo por mi culpa estan aquí.

— Al menos reconoces que eres una perra traidora.

— Si y tu eres un idiota que necesitaba un toque de realidad.

Ya no dice nada y sale, en cuanto la puerta se cierra comienzo a llorar y susurro.

"Lo siento Chris, nunca quise que me odiaras"

Nunca había estado tanto tiempo sin mis hijos y ahora no se que es lo que hacen o si siguen vivo las sola idea de que por mi culpa ellos sufran me quema por dentro no me importa lo que tenga que hacer pero los voy a sacar de aqui así muera en el intento.

Christopher Morgan

La estúpida de Gema no ha dicho ni una sola palabra solo pregunta por sus engendros a los cuales mande con un sumisa estan en una habitación sin salir, cada que la morena pregunta le advierto que aún no los e matado pero que ni no hanla lo hare.

Y soy capaz de hacerlo esos niños no son nada mío serían uno simples daños colaterales, Antoni daño a mi hijo yo puedo hacer lo mismo con el de Bratt.

La cambiamos de celda ahora estoy en una que cuenta con un vidrio yo veo lo que hace pero ella no es como un espejo, una de las sumisas termina de golpearle el rostro e sido especifíco solo el rostro ninguna otra parte del cuerpo.

Pero hoy es diferente no ha abierto la boca entonces sera azotada y golpeada esa fue la orden que di.

Observo como gema le escupe en la cara y ella solo le vuele a dar un puñetazo en la mandibula, la sumisa rasga la ropa que esta sucia y parece trapo viejo esta apunto de golpearla cuando la detengo.

Hay varios moretones en las costillas de Gema y ninguno de esos s los hicieron aquí además se ve que son de hace días.

Ordeno a la sumisa que se vaya y lo hace a regañadientes no sin antes darle una patada a gema que respira agitada.

— Que porfin te salio el valor de golpearme tú mismo. —Intenta reincorporarse. — Adelante tengo todo el día.

Me acerco y me coloco a su altura presiono el moretón de las costilla al hacerlo se retuerce de dolor.

— ¿Quién lo hizo?

— Tú sumisa. — Niego.

— La verdad.— Presiono más fuerte. — Quieres ver a tus hijos dilo y te llevare con ellos.

Su respiración se agita más y la duda pasa por sus ojos no confía en lo que digo razón tiene bien puedo sacarla y llevarla a una fosa donde esten los cadaveres de sus hijos.

— Donde esta el truco Morgan.

— No hay quieres verlos. — Asiente con la mirada apartada. — Tendrás que responder cada pregunta.

— Como se que no me estas engañando.

— Tendras que confiar algo demasiado peligroso pero sera peor si te quedas con la duda.

— Esta bien.

Para que vea que es verdad la suelto las cadenas de los tobillos, estos estan rojos y lástimados.

— Ahora habla quien lo hizo. — Escucho el largo suspiro que da.

— Fue Bratt.

La sorpresa llega al parecer el principe azul resulto ser un fraude más.

— ¿Quién es la niña pelinegra?

— Es Ivy mi hija mayor.

— ¿Por qué me traicionaste?

— Estaba asustada y Bratt prometio darme proteccion y un lugar.

— Asustada, ¿De que?. — Comienza a llorar. — Responde Gema.

— Estaba asustada de que me quitaras a mi hija.— Frunzo el seño para que querria a esa niña yo.

— ¿Por qué te la quitaria?

— Porque también es tu hija.

Que mierda!

— Qué estas diciendo— La levanto bruscamente. 

— Ivy es hija tuya y me entere de mi embarazo despúes de tu boda. 

La suelto mientras comienzo a dar vueltas como si estuviera en una jaula mierda no tengo otra hija y se ve que es mayor que los mellizo alditasea como no me di cuenta.

— Lo siento Chris pero no quería que me la quitara. — Llora desconsoladamente.

— No los veras.

— Qué?

— QUE NO VERAS A TUS HIJOS SE ACABO MATARE A LOS HIJOS DE BRATT Y ME LLEVARE A MI HIJA LEJOS DE TI. —Grito tan fuerte que retrocede tanto como puede.

— NO, NO, NO CHRISTOPHER POR FAVOR MIS HIJOS NO LO DIJISTE ME DEJARÍAS VERLOS. — Camino a la salida y trata de seguirme pero las cadenas de las manos la detiene. — CUMPLE TU PALABRA DEJAME VERLOS NO PUEDES MATARLOS POR FAVOR.

Volteo y la encuentro de rodillas suplicando no por su vida si no la de sus hijos balbucea no se cuantas cosas más así que regreso.

— Los veras aprovecha y despidete puede que la proxima vez que los veas sea en el más alla.

Se queda llorando mientras yo ordeno que implemente todas las torturas que quieran y me largo.


Second OpportunityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora