Escrito en las estrellas -COMPLETO-

Capítulo 23: En el azul

En el Azul

A/N

Otro capítulo para ustedes...

Comenzaré a actualizar esto con más frecuencia.

TBR

Ella lo estaba mirando de nuevo, sus ojos se iluminaron mientras aparentemente reflexionaba sobre lo que estaba demostrando ser un enigma bastante difícil de desentrañar, pero también con un toque de anhelo.

Daphne no había dicho nada de lo que había sucedido entre ella y Harry, y él tampoco. A Pansy no le habría importado si ambos simplemente hubieran pasado de lo que había comenzado a surgir entre ellos, pero ese no era el caso.

No pasó una comida donde no atrapó a la niña mirando a Harry, solo evitando sus ojos cuando el niño la atrapó.

Estaba empezando a molestar a Pansy y Tracey que habían tratado de hablar con su amigo en varias ocasiones en las últimas semanas.

"Vamos a Hogsmeade hoy, o no?" Pansy resopló cuando la mayoría de los estudiantes comenzaron a salir del Gran Salón en masa.

Daphne simplemente asintió, y el trío de chicas se unieron al siempre tranquilo Bulstrode Millicent que las perseguía.

Su presencia nunca había molestado a ninguna de las chicas.

Millicent no dijo mucho, pero escuchó y ofreció su opinión sobre las conversaciones de vez en cuando.

El grupo permaneció en silencio en el carruaje, y Pansy y Tracey compartieron una mirada e hicieron un acuerdo silencioso.

Hoy, obtendrían el fondo de lo que había sucedido, y con ambos presionándola, Daphne no podría despedirlos.

"Dónde iremos primero?" Tracey preguntó a los demás.

"Honeydukes", respondió Daphne con media sonrisa. "Me gustaría algunos Pistachos de miel."

Pansy asintió con la cabeza con la cabeza.

Necesitaba reponer su propio stock de golosinas que había estado agotando desde su última visita.

Saliendo del carruaje y dirigiéndose hacia la tienda, el silencio entre ellos continuó, y lo hizo hasta que compraron sus productos.

Con cada uno de ellos acuchillados con sus productos, visitaron Scrivenshaft para obtener tinta y plumas antes de pasar un tiempo en Gladrags, algo que generalmente animaba a Daphne.

Esta vez, sin embargo, se interesó poco en los vestidos que se ofrecían y se fue sin comprar un solo artículo.

"Los Tres Palos de Escoba?" Millicent sugirió.

Era la hora del almuerzo cuando llegaron al pub donde, evidentemente, muchos otros estudiantes tenían la misma idea.

"Hay una mesa junto a la ventana", señaló Tracey, asintiendo con la cabeza hacia donde un grupo de Hufflepuffs acababa de desocupar sus asientos.

Al instalarse en ellos, esperaron a que Madame Rosmerta tomara su orden, y una vez más, como lo hacían cada vez que comían, los ojos de Daphne buscaban en la habitación, sin duda buscando a una sola persona.

"Por el amor de Merlín, Daphne, ¿qué demonios te pasa?" Tracey resopló.

"Nada", negó la rubia con el ceño fruncido.

"Eres un mentiroso de mierda", suspiró Tracey. "Has estado así desde el Día del Boxeo."

"Desde que tu padre vino a hablar contigo", entró Pansy. "Lo que pasó?"