IN LOVE [F4 THAILAND] | ᴛʜʏᴍᴇ

Capítulo II

Nuevo día, una mañana más diferente a la anterior, y Jaidee no podía dejar de quejarse, desde que había abierto sus ojos no hacía más que quejarse. Ella quería, deseaba, quedarse en su casa y en la comodidad de su habitación, pero tenía que ir a la escuela, MJ se había comprometido a pasar por ella, sabía que la castaña no quería manejar y tampoco quería molestar al chófer para que la llevara.

-Buenos días — saludó el chico cuando Jaidee se subió al auto, dejando un beso en la cabellera de esta —. Alguien parece de mal humor.

-Lo estoy — un ligero mohín apareció en los labios de la chica mientras emprendían camino a la escuela —. Yo solo quería quedarme durmiendo, mis ganas de existir no son tantas, lo sabes.

-Tú y tus cosas raras — MJ negó con una sonrisa, Jaidee siempre solía decir ese tipo de cosas a broma, definitivamente su amiga no era normal.

¿Alguna vez te han acosado en tu antigua escuela? ¿O has intimidado a alguien más? Si quieren sobrevivir a esa escuela, deben estar en guardia ante todo. El acoso allí es grave. ¿Intimidación? ¿En ésta época? ¿En una escuela como esa? Justamente, porque es una escuela como esa. Cuanto mejor y más segura parece la escuela, cuanto más especial es. En esa escuela, hay un juego. El juego es juzgado por el grupo más influyente de la escuela, F5. Quien tenga problemas con ellos, recibirá una tarjeta roja en su casillero, lo que significa que cualquiera puede hacer lo que quiera con esa persona. Saben que no pueden hacer nada serio frente a la cámara. Tienen que ser lo más sutiles posible. Sin pruebas, nadie ha hecho nada malo. ¿Y los profesores? ¿No pueden hacer nada? Nadie se atreve. Ni siquiera el director. Al final, la víctima se ve obligada a ir a un antiguo estadio. Es el único lugar sin CCTV. Todos saben que no se permiten teléfonos ni grabaciones de ningún tipo. Sin pruebas, ellos pueden hacer cualquier cosa, frente a esos cuatro chicos y una chica, quienes son las personas más influyentes de esa escuela. Son conocidos como, F5.

El resto del camino permanecieron en silencio, silencio que Jaidee aprovechó para dormir un poco más, solo un poco. Los cinco se encontraron en la entrada de la escuela, estacionando sus autos, llamando la atención de todos como solo ellos sabían hacerlo. El grupo de amigos se dirigió directamente al Köcher Stadium, donde solían llevar a cabo sus actos. Al llegar al lugar, la mayoría de los estudiantes, por no decir todos, ya se encontraban en el lugar, acompañados de la víctima del día. Una Jaidee completamente disgustada por la situación, se sentó en uno de los sillones que habían allí para ellos, era una pérdida de tiempo hacer entender a Thyme que eso no era correcto.

Un chico se acercó al grupo, entregándole un teléfono a Thyme, este comenzó a leer la información que había en el aparato —. Phupha Komolpetch de la clase 6/1. Un estudiante destacado, con un historial limpio. Nunca tuvo problemas. Eres la mascota del profesor. Es una pena que todo eso se arruine, solo porque planeaste exponer lo que sucedió en ésta escuela — Jaidee vió como le entragaban una computadora a MJ, y por otro lado, Thyme se acercaba lentamente a Phupha que estaba de rodillas en medio del estadio, agachándose a la altura del chico —. Honestamente, ¿crees que soy un idiota?

-¿Entonces? Este juego de cartas rojas está mal — contestó Phupha —. No importa cuánto trates de encubrirlo, no puedes escapar de la verdad. Recuerda esto, Thyme. Esta evidencia no se perderá.

-¿Oh? — Thyme se enderezó y bufó —. Entonces debes haber hecho una copia de seguridad. Nunca se perderá — todos los videos en el teléfono comentaron a desaparecer, uno por uno —. Entonces, ¿cómo acaba de desaparecer?

-¿Cómo puedes hacer eso, Thyme? — Phupha intentó liberarse del agarre de otro estudiante —. ¡Thyme!.

-Phupha — Thyme volvió a agacharse a la altura del mencionado —. Para nosotros, nada ha sido difícil.