El reloj de arena en el centro de Ciudad Pentagrama era fácilmente visible para todos los habitantes del Anillo del Orgullo. Probablemente esto era intencional, ya que su único propósito era informar a los miserables pecadores de cuánto tiempo faltaba para el próximo exterminio.
Era una misericordia, de verdad.
El Cielo podría simplemente enviar a sus Exterminadores cuando quisieran. Su santo genocidio probablemente sería mucho más efectivo si descendieran sin ningún tipo de aviso. Aunque realmente no necesitaban el elemento de la sorpresa. Después de todo, no había manera de que una simple alma pecadora pudiera enfrentarse a un Exterminador y sus benditas armas.
¿No es cierto?
Angel suspiró profundamente, una bocanada de humo se elevó en el aire de la noche mientras sus ocho ojos se enfocaban en los números encima del reloj.
Ochenta y ocho.
Ochenta y ocho días hasta el próximo Exterminio.
—Pensé que te encontraría aquí.
Se sobresaltó ligeramente ante el sonido de esa voz profunda, girando apenas la cabeza justo a tiempo para ver a Husk entrar al balcón también, acercándose a paso lento hasta llegar al borde, a su lado.
—Sí...—Angel no pudo evitar sonreír un poco, volviendo su vista al reloj mientras le ofrecía su cigarrillo a su acompañante—. Es sólo que... realmente no podía dormir, ¿sabes?
Le tomó uno o dos segundos de vacilación, pero Husk finalmente tomó el cigarrillo entre sus garras y le dio una larga calada. El silencio se extendió entre ellos antes de que el humo fuera liberado en la forma de un suspiro.
—Ochenta y ocho días. ¿No es una mierda?
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Hábitos de mi Corazón (2024) [AngelHusk]
FanficDos demonios solitarios. Un par de tragos de más. Y un vacío que ninguno puede llenar. Husk había perdido la habilidad de amar hacía años, según sus propias palabras, y eso no iba a cambiar muy pronto. Angel Dust no cree merecer el amor verdadero de...