"Hoy parece ser un buen día hijos míos." Comentó Kagaya, el líder y la mente maestra detrás de todo el cuerpo de cazadores de demonios.
Exactamente, hoy era un buen día, el sol brillaba con fuerza, y el cielo estaba casi completamente despejado a excepción de alguna que otra nube que pasaba por ahí.
Hoy era un muy buen día.Y hoy, todos los pilares estaban reunidos, y el patrón se les unió juntó a dos de sus hijas al igual que su esposa, Amane.
Los pilares se mantenían arrodillados como muestra de respeto ante su patrón, lo apreciaban mucho."Si patrón, el sol esta sobre nosotros e iluminándonos con su gran esplendor." Comentó Uzui a su maestro mientras se mantenía arrodillado y miraba a su maestro.
"Mmm... Es bueno saberlo..." Dijo con una pequeña sonrisa en su rostro, el hombre estaría ciego, pero podía mas o menos sentir como era el día, ya que el calor del sol acariciaba su piel sana al igual que su piel enferma. "Bueno, quería hablar sobre el asunto de como va la misión del distrito rojo, Uzui. Dijiste que iba a ir usted mismo." Comentó el patrón.
"Si patrón, mis mujeres dejaron de enviar más cartas y me están preocupando... Solicitó ir yo mismo para poder comprobar como están." Pidió el pilar sin flaquear en su posición.
"...Mmm... Permiso concedido, pero tendrás que llevar a otras personas contigo e ir de incógnito, no queremos alterar a los civiles..." Instruyó Kagaya a Uzui. "Y si necesita refuerzos, no tenga miedo de llamar a uno de sus compañeros... No deseó perder a mas de mis hijos..."
Todos inmediatamente pensaron en Rengoku Kyojorou, un compañero, amigo, y hermano para algunos de los que se encontraban ahí.
Hace poco había caído en combate contra la luna superior tres, no la había logrado matar, pero salvo las vidas de los pasajeros del tren mugen.Muchos estaban tristes ante la perdida de aquél pilar, pero eso solamente los alentó a seguir luchando.
Kyojorou lucho hasta su muerte, y ellos harán lo mismo si es necesario."... Ya sabéis mis hijos... Si llegáis a recibir un mensaje de Uzui, ir lo más rápido posible para acudir en su ayuda... Eso sería todo, a no ser que alguien más quiera consultar algo aquí." Incitó el patrón al restó de pilares a hablar.
Todos inmediatamente se negaron, a excepción del pilar más joven.
"Patrón... Tengo algo que consultar con usted." Dijo Muichiro con su típico tono tranquilo e inexpresivo.
"Habla hijo mío." Incitó al pilar de la niebla a decir lo que tenía que decir.
"... Mañana y pasado mañana no voy a estar disponible, voy a estar en una boda... ¿No sería un problema?" Comentó mientras miraba a su maestro.
No hace falta decir que muchos miraron al adolescente con confusión y sorpresa, ¿Él chico tenía algun conocido o amigo que se iba a casar?
¿Quién quería a este en su boda?
Es más, ¿Cómo si quiera fue invitado a una boda?Muichiro simplemente se quedó callado, esperando la respuesta de su maestro.
"... Oh, no te preocupes Muichiro, disfruta de la boda... Pero si no te importa que pregunte... ¿De quien es la boda? Me gustaría felicitar a la futura pareja casada si es alguien del Cuerpo..." Pregunto el patrón amablemente.
"... Es mi boda señor..." Dijo de la nada el pilar de la niebla.
Decir que todo el mundo se quedó en silencio por la sorpresa era quedarse cortos.
Todos dejaron de respirar, los pájaros dejaron de cantar por unos momentos, los pilares miraron con los ojos muy abiertos al joven pilar de la niebla al igual que Amane y sus dos hijas.

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Un hashira y la mujer de las calles
Fiksi PenggemarFue para todos una sorpresa al enterarse de que Tokito Muichiro, el pilar más joven y también el más pasota de la historia, se estaba casando. Aunque Muichiro tampoco parecía estar ocultandolo, no es algo que mencionará ni una sola vez. Aquello sola...