GUILTY -[KSJ&MYG]-

VI

Fantaseo con eso todo el tiempo, Si fueras mío...

Fantasize- Ariana Grande.

La oficina se había llenado de bajos sonidos de jadeos y respiraciones agitadas, Seokjin podía sentir como la piel le ardía debido al calor que se extiende en su interior.

Sus bocas juntas y sus alientos, el chico jadeaba cada vez más fuerte cuando sus dedos se torcían dentro de él. Se dejó llevar y casi se quejó cuando tuvo que dejarlo ir, aún así fue consciente de lo que iba a pasar, de lo que tanto deseaba que pasara. Apenas el condón apretó en su erección y-

"¿Estás listo?" le preguntó al doncel que se preparaba para subir nuevamente sobre su regazo, se apoyó en el respaldar de su silla mientras le rodeaba la pequeña cintura con uno de sus brazos para ayudarle a montarlo.

Mierda.

Su otra mano paseando sobre los muslos pálidos del muchacho. Tan suaves y llenitos donde marcaba sus dedos extasiados de placer al ver como la piel en ellos se volvía rojiza.

"¿Estás listo?" Yoongi le repitió la pregunta haciendo que el hombre bajo su cuerpo le mirara con el ceño fruncido sin comprender, "Deberías de preguntarte si tú estás listo para lo que vas a vivir"

Oh,

La sonrisa en sus labios hizo que su aura dominante saliera a la luz, el cabello negro casi cubriéndole el rostro y esa mirada. Sus ojos llenos de fuego.

>>"¿Estás listo para confirmar que dios es un doncel?" sonrió mordiendo sus labios rojos y brillantes.

Oh, Seokjin

¿Estás realmente listo?

"Estoy listo para escuchar a dios gemir mi nombre" le siguió el juego.

Yoongi volvió a sonreír ahora más grande, con malicia, antes de que su rostro se transformara en una mueca de placer mientras se enterraba el pene del mayor tan deliciosamente...

Seokjin abrió los ojos de repente, con el corazón palpitando como loco dentro de su pecho. Las sienes, el vientre y la erección dentro del pantalón de pijama le palpitaban de la misma manera y su boca abierta luchaba por llevar oxígeno suficiente a su cerebro mientras su mano subía y bajaba a través del orgasmo.

Por más enfermo que llegue a sonar, ya se había acostumbrado a despertar de esa manera. Ha tener ese tipo de sueños.

El timbre no dejaba de sonar y él continuaba reponiendose. Miró el reloj sobre la mesa de noche marcando las 3:00 pm del sábado.

¿Quién mierda tocaba el timbre de esa manera?

Se limpió tan rápido como pudo y verificó que su ropa no se viera tan descolocada o manchada, bufó frente al espejo. Un hombre de 30 años no debería de tener ese tipo de sueños y fantasías con un chico tan joven, pero es que; Seokjin no había deseado tanto a alguien en su vida.