Jimin a sus 15 años quedó embarazado, sus padres, amigos y novio le dieron la espalda al enterarse, dejándolo solo y en la calle con un bebé que ni siquiera sabía como había concebido, si él era virgen...
Viviendo humillaciones día a día, perdiendo...
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—papi está muy rico, nunca había comido así de rico!—festejo Seobin muy alegre con su desayuno.
—amor a ti te gustaría que nos quedáramos aquí?—pregunto Jimin.
—si papi aquí hay mucha comida y una cama y ese señor parece estar solo como nosotros y él es muy grande y nos puede defender papi, nos quedaremos?—preguntó el pequeño.
—no lo se bebé—dijo Jimin aún sin saber que hacer.
—papi yo no quiero seguir durmiendo en el parque aquí dormí muy rico en esa camototota—dijo extendiendo sus brazos.
—lo se amor, termina de comer mientras yo aseo—dijo triste al saber que la "vida" que llevaba su hijo no se podía llamar vida.
Jimin estaba pensado mucho en los pro y los contra de quedarse o irse, era difícil creer que alguien de la noche a la mañana quiere ayudarte y sin recibir nada a cambio.
—solo espero no arrepentirme después—suspiro cansado.
Jimin decidió limpiar el departamento eso le llevo gran parte de la mañana y tarde, ya iban a dar las 6:30pm cuando termino, Seobin estaba acostado en la cama y Jimin llego al cuarto después de arreglar todo, apago las luces y se acostó con Seobin y sin querer el cansancio le gano y se durmió.
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A eso de las siete de la noche estaba Jungkook fuera del apartamento debatiéndose en si entrar o no, llevaba comida por cualquier decisión que haya tomado el rubio. Agarró valor y abrió la puerta y vio que todo está en silencio y las luces apagadas, las encendió y vio lo que no quería, el rubio se había ido suspiro triste y algo desilusionado, entró a la cocina y guardo la comida en el refrigerador hasta el hambre se le había ido, luego se dirigía a su cuarto y vio que donde había dejado su número de teléfono seguía allí, suspiro triste nuevamente él no dejó de pensar en el rubio y Jimin se fue como si nada, cuando iba a entrar a su habitación le dio por entrar a la habitación donde durmió el rubio ayer, y se sorprendió al verlo junto al pequeño dormidos. Jamás había sentido tanta felicidad hasta ese momento, donde vio que Jimin no lo había dejado, se fue en silencio con una gran sonrisa que no había nada en ese momento que haría que se fuera de su rostro, se tiró a su cama muy feliz, parecía adolescente con su primer amor.
Una hora después ya estaba bañado y con su pijama puesta cuando alguien tocó su puerta y fue abrir, sabiendo que era el rubio.
—Jimin que bueno que no te fuiste—fue lo primero que salió de sus labios.
—yo quería hablar de eso, tiene tiempo?—preguntó tímido Jimin.
—claro vamos a la cocina, vas a cenar, traje comida—dijo mientras caminaban hacia la cocina.
—si está bien, yo iré a despertar a Seobin.
Jungkook se encargo de sacar comida y Jimin se fue a despertar a su hijo, luego estaban los tres en el comedor.
