El Ayer Sigue Aquí [Choso Kamo]

12. Cobardia

15 años atrás .....

El sonido del alto parlante llamando a cirujía ,además del sonido de un electrocardiograma, rompían el silencio de ese cuarto de hospital.

Un joven a uniforme negro de preparatoria , de mirada preocupada y cansada estaba de pie , al costado de una cama de aquélla habitación de hospital.

la luz de medio día entraba por una ventana cercana e iluminaba su rostro , se notaba a leguas su evidente preocupación y tristeza.

Ése chico observaba a una mujer de entre 30 a 40 años, su tez era pálida, se podía notar que su salud no era buena, debido a sus evidentes ojeras y leves hematomas en sus antebrazos y parte del rostro.

Ella yacía dormida, por lo que aquel jovén se dedicó simplemente a observarla con detenimiento, pero, ella abrió sus ojos negros sintiendo su mirada fija , la cuál la despertó de ese sueño.

Los ojos de ambos se encontraron, lo qué provoco una sonrisa dulce por parte de aquella mujer, la cuál se ruborizo ante la presencia de aquel muchacho.

-Hola cariño...
como está hoy mi campeón eh?
Rompió el silencio aquella mujer.
-Es medio día....
No me digas ...que...
Te volviste a saltar clases para venir aquí...
Choso? Eso hiciste?...

El silencio fue la respuesta de aquel joven, simplemente bajo su cabeza avergonzado, dando a entender que había desobedecido su consejo.

Aquella mujer dedicó una mirada seria,la cuál no tardo en suavizar, y dejando salir un suspiro, dejo salir una palabras de manera suave.

-Choso, Cariño..
Ya te lo había dicho.....
no es necesario que vengas..
Enfócate en tu educación...
Se que ya casi son los finales cariño...
Debes estudiar y prepararte para la universidad.....
Comentó aquella mujer con voz entrecortada .

Aquel chico hizo un pequeño puchero, y se rascó la cabeza algo nervioso, ante el comentario de esa bella mujer.
Él portaba un uniforme a color negro que resaltaba su palidez, tenía pelo corto, y su rostro lucía libre de imperfecciones, tenía una mirada dulce y cansada, pero penetrante, que deposito en ella.

-Pero... mamá...
No puedo concentrarme....
Sabiendo que estas sola aqui...
Yo , quiero estar aquí a tu lado ..
Además....
Itadori quería que viniera....
Dijo aquel pelinegro con voz suave haciendo una mueca algo infantil.

-Ay mi Choso...
Oh eres tan dulce y amable...
Mira que concientes demasiado al pequeño itadori..
Dijo ella extendiendo su mano para acariciar la mejilla de aquel muchacho.

Choso!!
¡Estás Helado!!....
Que te he dicho de abrigarte eh?
Están comiendo bien?
Reprendió en tono dulce y directo.

Era obvio que él, no estaba cuidando muy bien de si mismo, se notaba en su uniforme sucio y arrugado, sus ojeras por desvelarse por la escuela y el hecho de que su madre estuviera enferma.

Se había vuelto costumbre en el pasar noches en vela, preocupándose por el futuro, el sobre pensar se había convertido en un hábito ya.

Simplemente se dedicó a evadir la pregunta, sacando otro tema de conversación.
-Mamá...
Como te dije...
Vine por qué Itadori quería que te trajera esto....

Aquel chico, quitó de sus hombros su mochila , de la cuál saco una hoja, se podía notar el cuidado que choso había dedicado en cuidar que no se maltratara.

Se podía ver qué era un dibujo con garabatos que él pequeño itadori de 5 años, quién tuvo la genial idea de pedirle a su hermano se la entregará personalmente.