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El viaje es en silencio, y en algunos momento se torna un poco incómodo, Sergio debe admitirlo.
¿Dónde está la boca suelta de Mick cuando la necesitas?
Juega con sus dedos y trata de no mirar muy obviamente el perfil de Max, quien tiene la mandíbula apretada mientras se concentra en la carretera.
"Por favor, no me digas que tengo manchas de marcador en mi cara" deja escapar de repente Max, mirando furtivamente a Sergio antes de que sus ojos vuelvan a mirar al frente.
"...¿No?" Sergio responde honestamente, un poco confundido y también un poco avergonzado de haber sido cachado mirándolo descaradamente.
Max suspira aliviado. "Mick estaba jugando con algunos marcadores antes y casi me deja como un ferrari, todo rojo".
Sergio se ríe. "Entonces parecerías un tipo rudo con una cicatriz, eso es atractivo".
"¿Oh sí?" Max responde, su voz desafiante y coqueta, le sonríe a Sergio y —Mierda, ¿Max le acaba de guiñar un ojo? Oh querido señor Jesucristo, el corazón de Sergio late fuerte y rápido contra su caja torácica mientras reprime un chillido. "Dice el que va por el look de chico malo hoy."
Sergio se siente como un venado frente a un carro, atrapado. "¿Es... es demasiado?" Parpadea tímidamente, agarrando con fuerza el cinturón de seguridad mientras espera tentativamente la respuesta de Max.
"No, no, claro que no." Max lo tranquiliza, sus ojos están un poco vidriosos cuando se fijan en los de Sergio. "Te ves increíble ." La última palabra sale apenas como un susurro de reverencia soñadora.
Comparten una sonrisa tímida.
Gracias Carlos, puedes vivir un dia mas, piensa Sergio.
"Nunca hubiera imaginado que eras maestro de jardín de infantes", dice Max, y luego añade frenéticamente. "Es un cumplido, por si no lo notaste, por qué no hay nada de malo en ser maestro, es algo muy bueno, mierda salió raro, mejor me callo ¿no?"
Sergio niega con la cabeza y se ríe alegremente.
Por alguna razón, Max continúa balbuceando, sus mejillas se vuelven levemente rojas con cada segundo que pasa. "Tengo algo, ya sabes, por los chicos con delineador, mierda, lo siento. ¿Por qué acabo de decir eso? Cinco años con un niño y me he olvidado por completo de cómo interactuar con los adultos".
Sergio niega con la cabeza y mira con ternura a Max. "Me gusta este lado tuyo".
"¿En serio? Uf." Max está actuando torpe ahora, su dedo golpea impacientemente el volante revelando lo ansioso que está a pesar de su máscara de compostura. Dios, Sergio va a arder. "Es simplemente... mierda. Te ves muy sexy. ¿Es la primera vez que usas esto?"
