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Tuve mucha pena cuando me acerque y le dije que tenía que comenzar mi horario de trabajo ¡Ah! Hant y sus tres días.

Hant:

Hola peque peque ;)
Vendrás hoy a trabajar ¿Cierto?

Apenas terminaba mi clase y ya tenía que ir a trabajar, le había prometido a Adrián que podría acompañarme luego de clases, pero si estaba trabajando se me iba a dificultar un poco más.

Llegué al centro comercial y me detuve justo en la puerta estaba sudado y no buscaba algún tipo de parálisis, estuve saltando delante de esta durante lo que seria, 15 segundo y entre corriendo. «Como me agarren por andar de apurado, te denunció» tampoco tenía dinero para una denuncia así que, eso no iba a suceder.

Cuando llegue estaba mucho más diferente de hace días atrás.

Music and Coffee

Era el nombre que ahora estaba en medio de los dos pisos, el girasol ya no estaba en la entrada, por dentro todo era de madera con mesas un puesto de dulces caseros y café. Había una maquina de discos en una esquina algo retro. Se había formado una gran fila en cuanto al café y demas.

Tenía planeado acercarme a Hant antes de que esté me localizara.

–¡Tom! –me saludo alegremente desde la caja–. ¡Tom, tienes que subir y atender arriba! ¡Aún no está abierto! –comence a asentir, un poco avergonzado teniendo en cuenta que las personas nos miraban de vez en cuando–. ¿Ok? ¡No te preocupes por mí! ¡Algunos primos me van a ayudar aquí abajo así que...

–Si, si, si. Te escuché –dije mientras subía rápidamente las escaleras en donde antes no habia alguna puerta.

Salon de música.

No se por qué eso me hizo sentir un poco nervioso, pero habían personas abajo, y no tenía tiempo para estar nervioso. Tomé la llave que había a un lado y entre.

A diferencia de unos días: habían luces led de un color morado estético, más sofás, estanterías, y un escenario algo pequeño en una esquina, allí donde estaba el piano y un micrófono, discos decorando las paredes con una estantería más con posters de diferentes bandas, solistas, etc.

Camine despacio por el lugar fijándome en varios de los instrumentos musicales del lugar, era, simplemente...

–Hermoso. –tome el gafete que colgaba de la pared y me lo puse en el cuello, guardé las llaves en mi bolsillo.

Acomode algunas cosas y abrí las puertas.

Y, en unos minutos comenzaron a entrar las personas curiosas y emocionadas. Algunos se acercaron para examinar desde la entrada y otros simplemente, fueron directos a las partes que más les llamaba la atención.

Tuve que hacer mi mayor esfuerzo para no perder la paciencia cuando cada persona, se acercaba a mi y no dejaba hablar a los demás, o preguntaba cosas sin sentido. Estuve casi media hora ayudando a algunas personas de secundaria a tocar la guitarra (aunque no sabía cómo hacerlo) me había fijado en un manual de internet.

Aunque, la mayor parte también fue un poco reconfortante, aún si me negaba a admitirlo. Ver personas sentarse y platicar sobre bandas o sus canciones favoritas, era algo que, de cierto modo, me daba felicidad. Tal vez por el hecho de que siempre quise compartir parte del tiempo con ese tipo de cosas. O bueno, si lo hice. Pero era un tema algo superado.

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⏰ Última actualización: Aug 15 ⏰

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