01 ^^

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"Sabes quién soy, pero no sabes lo que sufro"

Lágrimas inundaban mis ojos.

Sentía cómo mi pecho se comprimía.

¿Eso era todo lo...?

No, no, no, no podía ser así. Me negaba a que fuera así.

Era la mitad del diario, la mitad de su historia y todo lo que había vivido ella sola.

¡Y yo pensaba que la conocía!

Había pasado eso, ella sola. No era la cosa más desgarradora que te dejaría traumada o en unas sesiones psicológicas.

Pero de igual manera dolía. Me dolía. Era mi amiga, mi mejor amiga. La quería mucho, habría dado mucho por ella.

Era conciente de que era, apenas, la mitad del diario. Faltaba mucho por leer. Pero no lo haría ahora.

- ¿Maya? ¿Estás despierta?

Theo sonaba preocupado. Eran las 15:19 hrs. Era miércoles. Claro que estaría preocupado.

- Sí, lo estoy, pasa - informé mientras me secaba las pocas lágrimas que amenazaban con salir.

Abrió la puerta y entró lentamente, quedándose parado cerca de la puerta.

- ¿Qué ha pasado? ¿Leíste algo fuerte?

- Sí, me siento un poco mal por lo que pasó

- No es tu culpa, no lo sabrías porque ella decidió mantenerlo guardado para sí misma.

- Tienes razón. Pero ella era una buena persona, no hizo daño a nadie.

- Así cómo no sabías lo que pasaba por su mente, tampoco sabes las cosas malas que sí hizo. No puedes negar ni afirmar nada.

Theo era muy bueno haciendo que razonara, era como si compartiera su sabiduría conmigo.

- Tienes razón - repetí, y es que claro que tenía la razón. No iba a ser tan terca como para negarlo. Hice un puchero, quería llorar.

- No llores, por favor

- Duele

- No tengo idea de cuán grande es tu dolor, por favor, no llores

- Theo...

Se acercó a mí a pasos rápidos y me envolvió en un cálido y reconfortante abrazo.

Me gustaba mucho pasar tiempo con él, era muy amable conmigo, me cuidaba cuando sentía que lo nesecitaba, si teníamos un desacuerdo lo hablabamos tranquilamente, era muy comunicativo.

Besó mi cabello transmitiendo tranquilidad y protección.

- La extraño mucho - comenté con la cara hundida en su pecho

- Lo sé, cariño. Yo también la extraño

Tras decir eso, nos separamos un poco.

- ¿Qué habrá sido de ella?

- No lo sé, pero no te martirices con eso

Veía la preocupación en sus ojos. Tras un suspiro decidí hablar de nuevo

- Te quiero mucho, Theo, gracias por estar siempre para mí

- Yo te quiero mucho también,  Maya. Estaré para tí cuando me nesecites

Volvió a darme un beso en el cabello. Él no era de esos que prometían un 'para siempre'. Él no demostraba su amor con contacto físico cada que podía. Pero lo hacía. Era confuso, pero yo entendía.

- Kia te diría: "¡Ay, niña! Cálmate un poco" -reí ante la imitación de su acento y su voz

- ¿A qué viene eso?

- No sé, solo recordé qué lo decía muy seguido

Sabía el dolor que me generaba aquella situación, pero... ¿Cómo se sentía Theo? Digo, eran casi hermanos, sabía imitar ese acento latinoamericano gracias a Kia. Ella le había enseñado, y él le había ayudado con la pronunciación de nuestro idioma al llegar aquí. Eran cercanos.

- Cariño ¿Te duele no saber casi nada?

- Sí, no sabes cuánto

Sonrió con tristeza, imagino que recordando los bellos momentos que habían compartido juntos.

- Me siento bipolar - digo luego de un silencio en el que me dediqué a mirar su cara

- Admito que yo también

Nos acostamos en mi cama, mirando al techo mientras pensábamos, supongo, en Kia.

Su amplia sonrisa. Era muy alegre y positiva. Amable y servicial. Pero cuando se enojaba sacaba a relucir que era Latina. Al menos eso decía ella.

"Cuando me enojo, soy igual que una típica madre latina"

Amaba cuando nos enseñaba palabras de su país. Gracias a ella había aprobado español. Se ofrecía a ayudarme durante las tardes. Me explicaba la diferencia entre la variedad de acentos.

- ¿Quién nos ayudará con español? - pregunté de repente

- Tenemos que estudiar por nuestra cuenta, tal como lo hemos hecho en estos meses.

- Amaba su acento

- Yo también

- A veces era gracioso

- Quieres llorar ¿no?

Asentí y dejé que las lágrimas que había retenido antes, salieran. Theo solo me abrazó y dejó que llorara todo lo que quisiera. En alguno que otro momento escuché cómo él soltaba algún sollozo. Compartíamos el dolor de haber perdido a nuestra amiga más cercana, casi una hermana.

Cuánto extrañaba a Kiara Wilson

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¡Hola, gente guapa!

Maya y Theo son igual de bipolares y confusos que yo. Al menos en este capítulo.

Los capítulos serán cortos y de esta manera una lectura más ligera. Creo que son muy cortos 😭

Les agradecería que votaran, comentaran y compartieran la historia, me ayudaría mucho. Y si no es mucho pedir que me siguieran por aquí.

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¡Nos leemos pronto!

El diario de KiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora