Autismo || Marcanne

《 PARTE 3 》

—Expliquense. —Dijo la castaña a la rubia y al pelinaranja

—Claro, solo, dejame... veamos... debo ir al baño.

—Ah no, Sasha, de esta no te libras, toda la sala esta molesta contigo y con Sprig.

—Ahg, me ofendes, Anne.

—Más ofendiste tu a la sala entera.

—Pues que vuelvan a ver la puta pelicula.

—Sasha...

—Ya, lo sentimos.

—Acepto tus disculpas, Sprig, pero, necesito que me expliquen que carajo estaban haciendo.

—¿Viendo la pelicula? —Sasha dijo con una pizca de sarcasmo en su voz

Anne miró a ambos esperando que respondieran su pregunta, ambos se rindieron al entender que no iban a poder irse sin darle una explicación a la castaña.

—Y pues Sasha tenía el objetivo de- ¡ahg! —Sprig dejo salir un quejido de dolor, al sentir que alguien le pisó el pie

—¿Yo? ¿Cuando mencioné algo sobre eso? —Clavó la mirada en Sprig

—N-nunca, me equivoqué.

Anne suspiró, luego les dio un pequeño golpe a cada uno, y al voltear a donde supuestamente estaba Marcy...

—¿Marcy? ¡Marcy! —Volteó a todos lados, pero no veía a la pelinegra

—Oh diablos...

Los tres empezaron a buscar a la chica, Sasha salió a buscarla fuera del cine, Sprig revisó el lugar y Anne fue a buscarla en el baño de mujeres, pero ninguno la encontró, hasta que a Anne se le ocurrió un lugar improbable en el que ella podría estar, pero era el único que no habían revisado: el baño de hombres.
Entró al baño, solo lograba ver a al menos dos chicos que parecían estar acomodados en el final de la pared, como si estuvieran intentando hacer que nadie viera lo que rodeaban.

—¡Hey!

Ambos chicos voltearon.

—¿Que quieres?

—Más importante, ¿que haces aquí, perra?

—No empecemos con los insultos, ¿que tienen ahí? ¿Droga? ¿Cigarros?

—¡Nada!

—Mejor vete, perra.

Anne los observó con detenimiento, logrando ver una cabeza entre los dos chicos, se acercó, tanto que tan solo unos pasos los distanciaban.

—¿Hay otra persona ahí?

Los chicos se quedaron en silencio, pero, ambos se apartaron, dejando ver a Marcy, que por el miedo, no hablaba.

—¡Marcy!

—Vaya... parece que estas dos perras se conocen.

—Seh.

Marcy levantó la mirada.

—¡Anna-banana! —Trató de correr hacia Anne, pero uno de los tipos la agarró del brazo y la atrajo hacia el

—Oh no, tu te quedas aquí.

—¡Anna-banana! —Marcy gritó y sollozo un poco, tratando de liberarse

—¡Dejenla! —Anne avanzó hacia el tipo que agarraba a Marcy, pero el otro se puso frente a ella

—Jaja, ¿crees que la recuperarás tan fácil?

Anne apretó los puños, pero pasó algo que ninguno se esperó...

—¡Sueltame! ¡Quiero ir con Anna-banana! —Gritó Marcy en un tono que mezclaba ira y tristeza, con un poco de miedo

—Mmm... nah.

—Quiero... ir... con... ¡Anna-banana! —En ese último gritó, le lanzó una patada en la entrepierna al chico, este la soltó, pero antes de poderse tapar, Marcy le dió otra patada el doble de fuerte y corrió con Anne—Cuando quiero estar con Anna-banana, voy a estar con Anna-banana.

—M-maldita —El chico se puso en el suelo de rodillas, mientras el otro no sabía bien que debía hacer

—¿Y tu? —Habló Anne mirando al segundo chico—¿Te vas a quedar ahí?

—Solo... larguense. —Dijo con vergüenza

Anne sonrió de forma triunfante y se fue con Marcy.

—Emm... Marcy, ¿que hacias en ese baño?

—Tenía ganas de hacer del baño, pero seguían limpiando el de mujeres, así que entre al de hombres. —Dijo con inocencia en su voz

—¿Y... esos dos intentaron hacerte algo más...? —Dijo Anne con preocupación

—No, pero creo que lo hubieran hecho si no llegabas a tiempo, Anna-banana, me alegra que me encontrarás. —Al terminar de hablar, le sonrió a Anne

—Yo también me alegro de haberte encontrado. —Le dió un abrazo a Marcy y la pelinegra le correspondió

Siguieron caminando, buscaron a Sasha y a Sprig, pero estaban ocupados jugando en una de las maquinas en la que das un golpe y te aparece un puntaje de tu fuerza.

—¡Mierda! —Gritó Sprig al ver su puntaje, a penas rozaba los cuatro mil

—Hey Sprig —Sasha le habló—No te ssientas mal, pero... —Hizo a Sprig a un lado y ella tiró un golpe, llegando hasta los seis mil

—¿¡Como!? —Sprig sintió que la espada de la derrota lo había atravesado

—Pues así como lo ves, esto es lo que fue. —Sasha rió

—Hey ya encontré a Marcy. —Anne les dijo, vió la máquina y pensó en darle un golpe

—Anna-banana, ¿puedo golpear eso? —Señaló a la máquina

—Claro. —Puso el dinero para dos tiros en la máquina

—No creo que me llegue. —Dijo Sasha

Marcy suspiró, luego aventó un golpe...
su puntaje superó a Sasha, llegó hasta los siete mil.

—¿¡Como!? —Gritaron Sasha y Sprig al mismo tiempo

—Golpeandolo. —Les respondió Marcy.

—Me toca. —Dijo Anne, se puso frente a la máquina y lanzó el golpe, claro que con un poco de ira almacenada porque no pudo golpear a los chicos que molestaron a Marcy, pero eso le ayudó a ganar ocho mil quinientos en su puntaje

—Anne... recuerdame no molestarte de más. —Dijo Sasha

—A mí recuerdenme ir a entrenar, soy el más bajo aquí... —Dijo Sprig

Después de eso, todos salieron y cada uno tomó su camino, a los pocos minutos llegó la mamá de Marcy por ella y se despidió de Anne, quien estuvo con ella esperando hasta que la recogieran, pero se entiende.

—¿Y... como te fue, Marcy?

—Bien, mamá.

—¿Que pelicula vieron?

—Una de terror.

—Me esperaba que podrían haber visto una de Marvel como mucho, pero no eso, ¿tu querías ver esa?

—Si, mamá, yo la elegí.

—Oh, bueno.

Llegaron a la casa, ya era de noche y Marcy estaba muy cansada por todo lo que había pasado ese día, le dijo buenas noches a su madre y se subió a su cuarto para dormir.

Estando acostada, cerró los ojos e inconscientemente dijo algo:

—Anna-banana...