Prohibido [Marco x Ace]

Capítulo 20: Marina

No despertó de su sueño con el sonido de los pajarillos cantando ni en una nube color rosa, despertó de la peor manera. En su celo el sexo había sido glorioso, pero ahora tenia sus repercusiones.

Ace no tenias mas fuerzas, en ese momento había perdido la sensibilidad de sus piernas y caderas, demonios había sido una perra en celo y para nada tuvo descanso.

Marco realmente follaba como toro, ¿estaba bien para su edad? Incluso para él, siendo joven y sano era excesivo la forma en que podia ser llenado, pero la verdad sea dicho, amaba ser rellenado como pavo en navidad, el rubio era una mina de oro.

Miro al Alfa dormido a su lado como un bebé, sin preocupaciones y satisfecho, no se imaginó cuanta envidia se podía tener, él también quería poder dormir así.

Peinó su cabello azabache hacia atrás con sus dedos, frustrado, no solo su cuerpo lo molestaba sino esos estúpidos sentimientos hacia ese tipo mayor, deseaba no sentir nada y hacer todo más fácil pero, ¿por que no era así? Seguía volviendo una y otra vez.

Quizás su destino si estaba con él...

Un fuerte estruendo lo hizo salir de su burbuja de miel y casi cayó de la cama cuando el barco se ladeó como si fuera a voltearse.

Se puso alerta al igual que el Alfa que hasta hace unos segundos dormía a su lado y ahora se levantaba al momento.

—Quedate aquí, iré a ver que pasa -Ordenó con voz firme mientras salía preocupado de la cama a ver que sucedía.

Ace obviamente no iba a seguir esa orden, iba a salir al igual que él, si, claro que lo haría, una vez recuperara la sensibilidad de sus piernas, y su espalda lo dejara levantarse de la cama.

[...]

Al salir a cubierta Marco se tensó al ver  un barco de la marina delante de él y el sentimiento más amargo quemó sus entrañas como un miedo extraño en su ser.

—Hasta que sales capitán de la primera división -Bufó el peliblanco.

Dos tabacos en su boca no eran capaz de callarlo.

—Smoker -Marco no dijo con mucha mas emoción que el marine.

—Sabes, no me gusta ignorar piratas cuando están delante mio, pero escuché que tienes a uno de los míos asi que dámelo y te dejaré en paz por ahora.

Marco rió de forma amarga y sin gracia, viéndolo de la misma forma retadora que hacia smoker.

—¿Y si no quiero que? -Preguntó soberbio y recibió un codazo de parte de Izou y muchos mumuros de parte de sus hermanos.

No tenían prisionero a Ace como los periódicos decían, solo le estaban dando un aventó a tierra firme, así que no entendían porque su hermano se negaba a entregarlo cuando así era más simple.

—No quedras retarme -Aseguró Smoker

Marco sonrió con arrogancia y una estúpida seguridad que sus hermanos no habían visto en él desde sus tiempos cuando era joven e irresponsable.

—¿Que pasa? - Ace lo interrumpió asomándose detrás de él cuando al fin pudo alcanzarlo. —Oh... -Solo escapó de sus labios al ver el barco de la marina.

Marco quedo petrificado al verlo, tampoco es que esperara que Ace le hiciera caso en no salir, pero tampoco era que imaginara que un barco de la marina estaría esperando por él.

Sea un echo, Marco estaba en pánico en ese momento.

—Con que ahí estas -Smoker sonrió al verlo—Sabia que un niño como tu se metería en problemas.