Wrong Alpha - RadioApple

Capitulo 1

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Lucifer miraba con asombro la ciudadela, cautivado por aquellos grupos musicales que tocaban y algunos bailaban al ritmo del jazz, aunque tardo minimo una semana en poder llegar, no todo era arrepentimiento. Al bajar de la enbarcación, miro a su amigo de la infancia esperandolo.

-¡Stolas! -Chillo de alegria, dejando su maleta de lado y yendo a abrazar al Goetia. Habia pasado tiempo desde la ultima vez que lo vio.

-¡Luci! -El mas alto correspondio el abrazo del mas bajo. Quedandose asi unos momentos hasta que se separaron-, Tiempo sin verte, al parecer no has crecido demasiado, eh.

El omega bufo, rodando sus ojos. No le agradaba mucho que se burlasen de su tamaño, es mas ¿que tiene de malo?.

Stolas solto una risita, tomando la maleta del mas bajo y subiendola en su auto. Ambos aun eran jovenes. Dos jovenes curiosos de la vida, aunque uno siendo una alma libre y el otro no tan libre.

Aunque el Goetia pudo haber traido un chofer, prefirio irse por su cuenta a recibir a su amigo de la infancia. No todos los dias tenia la oportunidad de librarse de sus padres de ese modo, y mas de alejarse de su futura prometida.

Como odiaba ser alguien influyente.

Pero a veces eso tenia algo bueno ¿no?. Miro al rubio, en su mirar se notaba lo fascinado de conocer un nuevo lugar. Parecia un niño pequeño.

-Entonces.. -Hablo Stolas, llamando la atención del omega-, Asi de facil te librastes de tu padre o tuvistes que hacer unas de tus artimañas.

Lucifer solto un suspiro y se acomodo en el asiento.

-Mi madre tuvo que ayudarme a convencerlo, ya sabes, estoy a nada de cumplir en unos meses los diezcinueve, y que tuviera una decisión.. tan drastica, como mudarme de ciudad, no le agrado a mi padre.

El Goetia asintio, deteniendose en un semaforo en rojo.

-Al final mi padre termino accediendo a mi petición. Aunque claro, no estaba de acuerdo, y por eso me comunique contigo.

Ambos jovenes permanecieron en silencio, el rubio miraba la ciudad desde la ventana de aquel auto, que de casualidad no era tan lujoso como los que comunmente el chofer personal del Goetia conducia. talvez para aparentar las apariencias.

-¿por que decidistes quedarte en un simple departamento y no ir conmigo? Ya sabes que siempre seras bienvenido Luci. -Stolas miro por el espejo retrovisor al rubio para luego mirar el camino.

-No quiero ser una molestia.

-Sabes que no eres una molestia Luci.

El rubio asintio, aun teniendo su atención en la ventana, viendo a los trauseuntes caminar de aqui y por alla. Antes de haber llegado a Nueva Orleans, habia comprado una pequeña casa en un vecindario que, a palabras de su amigo, es demasiado tranquilo. Ademas de que casualmente tambien quedaba cerca de la Universidad a la que el Goetia asistia.

Asi que no tenia por que preocuparse por el transporte, aunque sabia que su amigo pasaria a recogerlo aunque le dijiese que no es necesario.

Lucifer de cierta forma, se sentia vacio, vacio de dejar el lugar donde crecio. Pero no estaba nada mal probar cosas nuevas, ya sea trabajar o hacer las cosas por su cuenta, sin que sus padres esten ahi. Sabia que todo iria bien si no se confiaba demasiado.

La casa que habia comprado no era tan llamativa como lo era el hogar de sus padres. Realmente era algo sencilla pero de cierta forma la veia demasiado comoda. Se despidio de su mejor amigo y se dirigio a la entrada del que seria su nuevo hogar. No debia de preocuparse por sus muebles, pues desde antes ya se habia encargado de eso con ayuda del Goetia.

Cerro la puerta y miro el interior de su nuevo hogar. No es algo fuera de comun, era calido y reconfortante. Sabia que en algun momento su hermano mayor llegaria, por que su padre no lo dejaria irse asi como asi sin ninguno de sus otros hermanos. Aunque por ahora no debia preocuparse por eso.

Por ahora debia adaptarse a su nuevo hogar.

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No habia pasado no mas de tres dias desde que llego a Nueva Orleans, aun no hay señal de que su hermano mayor llegara. Aunque preferia seguir asi unos dias mas.

Ese dia Stolas le pidio de favor acompañarlo a algun lado, y no pudo negarse. Aunque era preferible el conocer cada lugar de ahi y no iba a desaprovechar la oportunidad.

Stolas tarareaba una canción que talvez escucho por ahi en algun momento mientras caminaban juntos en el parque hasta llegar a una floreria. Que a su parecer, era demasiado hermosa por las distintas plantas y flores que decoraban tanto afuera como adentro de la tienda.

Ambos jovenes entraron y el Goetia saludo a una señora de la tercera edad. Que a su parecer seguia siendo demasiado hermosa aunque este en avanzada edad.

—¿Que hacemos aqui Stolas? —Pregunto, el alfa lo miro y sonrio calidamente.

—En algun momento tu me comentastes que te gustaba la jardineria y que si en algun tuvieras la oportunidad, pondrias una floreria.

El rubio asintio y dirigio su mirada a la señora.

—¡Oh! Joven Stolas, no crei verlo por aqui nuevamente —La mujer de avanzada edad se acerco al alfa con gran sonrisa. Stolas extendio los brazos y se acerco a abrazarla, siendo recibido calidamente.

—Lamento las molestias doña Katy —rasco su mejilla avergonzado—, No se si se acuerda del amigo que le comente el dia dia anterior —La mujer asintio y dirigio su mirada al pequeño omega que se encontraba al lado del Goetia.

—Asi que.. ¿Tu eres Lucifer no? Eres demasiado bello jovencito —La mujer se acerco al menor y tomo las manos del rubio—, realmente fuistes bendecido por Dios para nacer con una belleza unica, jovencito.

Lucifer se avergonzo por lo dicho por la mujer, siempre se lo han dicho desde que fue un niño, aunque siempre le daba verguenza que se lo dijieran.

—Yo a tu edad tambien era una joven realmente apuesta, debes aprovechar al maximo tu juventud mi niño, no todos los dias seras alguien bello, alguien bendecido —Lucifer asintio y sonrio. La mujer dirigio su mirada nuevamente al alfa.

—Entonces.. ¿que te trae por aqui jovencito? Es raro verte por aqui dos dias seguidos —reprocho, Stolas rio avergonzado.

—Me acuerdo que alguna vez me habia dicho que necesitaba a alguien para que le ayudara en su negocio de flores. Y casualmente a mi amiguito le gusta todo relacionado con eso —Rio y miro al rubio. Este se sonrojo y desvio su mirada.

Realmente no le gustaba que hablaran sobre las cosas que le gustaban, le daba algo de verguenza.

La mujer sonrio y nuevamente tomo las manos del rubio.

—Me caeria bien la ayuda de un jovencito como tu jovencito —Lucifer asintio—, aunque primeramente deberia darte algunos consejos, por que aunque este lugar parezca que no tiene ventas, siempre hay personas que vienen a comprar sus flores para darselas a sus parejas jovencito.

—Me parece bien —Lucifer sonrio, y se inclino un poco.

Talvez este sea un buen camino, ademas no debia preocuparse por mas cosas, ahorita solo debia preocuparse solamente por la Universidad.

Y su hermano mayor.