Capítulo VII

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Fill Lastra
Cinco días después

Llevo los últimos cinco días con la cabeza que me está por estallar de tantos informes que tengo que leer y analizar. Hemos desplegado escuadrones de investigación en España, Francia, Alemania e Italia. Me encantaría decir que eso nos facilita el trabajo pero no es así, parece que el haber extendido las tropas hace que Danielle sea más difícil de detectar que antes. No logré contactar con el ni una sola puta vez y eso me pone de mal humor. Su gente se mantiene perfectamente en la sombra y cada minuto que pasa pienso en que simplemente debería ir y cazarlo yo mismo. Siempre funcionó y no dejará de hacerlo.

Sumándole a eso tengo el jodido problema que ando de calenturiento pensando en estupideces sin sentido. No logro sacarla de mi cabeza ni por una sola vez y eso me pone mal porque entre más la piense más ganas de cogérmela tendré y eso no es nada bueno. En mi mente no deja de repetirse la misma imagen de ella con un vestido color azul claro, ajustado al cuerpo, con mangas largas y corto hasta los muslos con tacones color blanco. En todo el puto viaje de regreso a la ciudad tuve que acomodarme para evitar que se vea el bulto en el pantalón.

Trato de distraer mi mente en otra cosa, sigo leyendo los informes hasta que Kira entra en la oficina con unos documentos impresos. <<Más no, por favor>> Trae un semblante alegre y eso me hace arrugar las cejas, ¿Qué hay de bueno en todo esto? No avanzamos nada y cada vez parece hacerse más difícil.

-Ten. -Me entrega los documentos y trae la firma de la mujer que no sale de mis pensamientos.

-¿Qué es esto?

-¿Tú qué crees? Akari logró entrar en el número de teléfono de uno de los que trabajan para Danielle y consiguió estas conversaciones. -Me extiende nuevamente el documento y esta vez lo tomo para verlo. Son conversaciones con una mujer, dice que en dos semanas habrá un ''desembarco de mercancías'', que no podrá estar en casa y no sé qué mierda más. Es perfecto, tenderles una emboscada y liberar a las personas más el plus de derramar sangre de esos bastardos. <<Justo como me gusta>>

-Esto nos sirve. Aún quedan dos semanas pero te encargarás, verdad? -Demando y entiende a lo que voy. Se retira rápidamente y yo me recuesto sobre la silla para continuar leyendo. Son varias páginas donde recalca lo mismo ''desembarco de mercancías'' ''¡Es muy importante!'' ''Tengo que estar ahí!'' ''Será solo una noche'', Me distraigo y bajo la mirada a mi entrepierna que detalla el bulto haciendo presión contra mis pantalones, en todo este tiempo no he dejado de pensar en ella y me estoy volviendo loco.

Esto me está haciendo mal y afecta mi trabajo y a lo que decidí dedicarme, no puedo permitir que esta mierda malogre todo lo que con esfuerzo y voluntad conseguí. Salgo de la oficina, debería salir a trotar para despejarme, quizás eso funcione. Apenas salgo tengo a Aurora encima mío preguntándome a donde voy y si me puede acompañar, claramente respondo que no, odio que me acompañen a la tareas que siempre he hecho solo. Insiste tanto que por un momento pienso en ceder con una condición pero sé que tendré que soportarla hoy y el resto de mis días con preguntas estúpidas de ''¿Se repetirá?'' y honestamente, no quiero eso de nuevo.

Paso a cambiarme el traje por la vestimenta de entrenamiento, salgo y dejo que el trote me consuma. Las horas pasan y recibo una llamada de Akari devolviendo los pensamientos que intentaba deshacer. Contesto y su voz suave suena a través del teléfono, - ¿Fill?

-¿Qué sucede? -Contesto rápidamente para poder continuar sin que esté en mi cabeza.

-Hay varias personas aquí que están preocupadas porque no contestaste las llamadas, ¿Estás bien? -Ah, cierto, recibí llamadas de Kira, Raven y Aurora pero no contesté ninguna, sé que me dirán lo mismo de siempre y no deseo escucharlos.

La sombra del Gran MonarcaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora