Antes del desayuno, los aprendices fueron llamados al salón central, tenían que ser recibidos por el líder del clan Tang, el creador del examen y sobre todo dueño del recinto junto con el bosque Hwa después de... La guerra. ¡Pero eso es historia vieja!
El salón parecía un palacio de madera roja, un par de sirvientes les abrieron las puertas mostrando que el interior era más impresionante. Los arcos en los costados y los pilares eran igual rojos, pero en ellos estaban pegados sellos amarillo de tinta negra que alejaban a los fantasmas, en el lejano techo colgaban talismanes antidemonios, la mayoría se pregunto el porque, no había demonios ni fantasmas maliciosos en el recinto Tang, ¿por qué tanta protección? Las preguntas no fueron contestadas, ya que vieron en frente de ellos al líder del clan esperándolos con una sonrisa, el gran segador Tang XeungYo.
—Bienvenidos, jóvenes aprendices—los recibe sentado en el trono al final de la habitación. Era un hombre delgado de ropa negra, ojos afilados y cabello excesivamente largo, pero eso no fue la sorpresa, lo que impactó a los recién llegados fue el aspecto del legendario Tang. Gozaba de una apariencia joven a pesar de ser el fundador del examen que se ha implementado por 50 años seguidos.
La mayoría de los chicos habían escuchado de los inmortales, pero nunca esperaron encontrarse con uno. Su piel parecía de mármol bien pulido, si no fuera por sus movimientos de labios parecería una estatua.
A este no le importó la sorpresa que provocaba en los presentes, al parecer era demasiado normal tratar para él causar esa impresión, en lugar de calmar los nervios de los niños sonrió y se puso de pie con la mirada de todos, a excepción de los sirvientes, en él. —, Es un honor tener aquí a aprendices de tan distinguidos clanes. Debo decir que son más de los que tenía previsto. Nunca logran llegar tantos.
—¿Eso es bueno?—pregunta alguien en la multitud llamando la atención de Tang XeungYo, que con una sonrisa en su rostro ve en seguida al aprendiz que había hablado.
—Tu nombre, querido—le pide el segador inmortal.
—Del clan Ming, KoXing, hijo de la tercera cabeza del clan, Ming Rulan, de la secta de la Ciudad de los Rosales—se presenta mostrando sus respetos. —Es un honor conocer al segador inmortal, Tang XeungYo—le dice sonriendo sin vergüenza.
—Ming KoXing, de la Villa de la Primavera, que honor tener a la decepción más grande del clan Ming—Ming KoXing a pesar de las agresivas palabras del líder Tang siguió sonriendo. —¿Ya se decidieron por un color?—comenta el inmortal refiriéndose a la túnica, ya que ningún miembro del clan tenía un color (o una combinación de colores) en especifico como los demás clanes, curioso por que ni sus palabras le arrebataron el optimismo al joven Ming.
—La primavera está llena de colores, mi señor—responde.
—Me huele a pereza... Pero respondiendo a su pregunta, joven Ming... Muchos es novedad, no es bueno o es malo. Pueden venir mil candidatos y al final no ascender ninguno...—dice mientras camina a donde estaban los candidatos que permanecían quietos hasta que el líder Tang se detuvo. —Pero antes quiero ver quienes vinieron, reconozco algunos emblemas... Como el clan Tingfeng...—dice viendo al mayor de los Tingfeng que estaban presentes.
—Del clan Tingfeng, Zhun, hijo de la cabeza principal del clan, Tingfeng ChouGuan, de la secta de Ciudad Dorada—se presenta en cuanto lo miró mostrando sus respetos con una mejor postura que la de Ming KoXing.
Pero ni su buena presentación, ni su postura hizo que el líder lo respetara. El líder inmortal Tang se comenzó a reír, pero no era una risa normal, eran carcajadas escandalosas que hacen molestar al joven Tingfeng.
—¡¿Y a usted qué le parece tan gracioso?!—le pregunta gritando con el ceño fruncido.
—Nada, es solo que...—se detuvo para tomar aire después de la risa que había tenido. —, no pensé que el escuálido Tingfeng Gun se haya reproducido tantas veces, hace años vino uno, ¿como se llama? ¿Tingfeng JinLuo?... ¿Tienes más hermanos?
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头胎 | TOUTAI
FantasíaLos tristes días de guerra terminaron, las ciudades se esfuerzan por volver a su nueva gloria y todo el país de Ho'i trata de acostumbrarse a la nueva normalidad, pero una promesa es dada, los pequeños niños tienen que aprender rápido porque el enem...