Dios Brillante en Danmachi

Ghislaine Dedoldia/Eris Boreat

Casa familiar Rozzo, en la sala de estar de la familia.

Elinalise, que vestía sus cortos pantalones y una pequeña blusa, bajaba de las escaleras, con una botella de Coca-Cola.

"De verdad no sé de dónde saco esto Kami-Sama, pero es lo mejor que eh tomado" Elinalise vio la botella de Coca-Cola con ojos cariñosos.

Hace 2 años su Dios, creo algo llamado nevera, que parece permitir que las cosas se mantengan frías, ella no entendió como funciona, pero en su opinión es increíble.

Más que todo, porque dentro de ella , se guardan docenas de latas de Coca-Cola totalmente frías.

Caminando hacia la cocina, al lado de el lavaplatos una grande caja de metal de color blanco y negro, estaba majestuosamente colocada.

Elinalise que vio la gran caja de metal, asintió con satisfacción, está caja no solo guarda Coca-Cola, si no que también carne, pollo y otras comidas congeladas.

Dejando en la basura la lata de Coca-Cola, Elinalise camino hacia la nevera para sacar  su invento favorito hecho por su Dios, abriendo el así llamado congelador, Elinalise cuidadosamente saco una pequeña caja plástica y dejando en el mesón el preciado artículo, se preparó para abrirla.

"El invento divino, el HELADO" Elinalise abrió la tapa y una un líquido congelado de colores apareció frente a ella.

Sin perder mucho tiempo, tomo una cuchara y luego camino, hacia su habitación, lista para seguir leyendo otro de los inventos de su Dios, Los Cómics.

Sin embargo antes de que pudiera subir, a su habitación vio a su Dios en la sala de estar con una ropa extraña.

Tenía un sombrero de paja que cubría su cabeza, llevaba un Haori blanco con gris, una larga katana colgaba de su lado izquierdo y una botella de sake colgaba de su lado derecho.

Sentado con las piernas cruzadas y con un pedazo de maiz de trigo en su boca.

Elinalise quedó estupefacta por la vista. "Kami-Sama, que demonios haces, porque estás vestido como un samurái?"

Si fuera antes ella no sabría que es un samurái, pero después de leer cientos de novelas ligeras, tiene claro la cultura samurái.

Kaylon bajo la cabeza, su sombrero ocultaba su rostro, luego cuidadosamente, destapando la botella de sake tomo un trago.

"La luz de la luna se refleja en mi espada, está noche dejaré que la luna lave mis pecados, porque hoy todos serán cortados bajo mi espada" Kaylon pronuncio la frase solemnemente.

"Es de día... " Elinalise dijo, luego sintiéndose incómoda inmediatamente gritó "RIVERIA-CHAN, KAMI-SAMA POR FIN ENLOQUECIÓ!!"

El grito resonó por todo casa, haciendo que la puerta donde reside se abriera, y saliera una Riveria confundida, luego bajo a paso rápido la escaleras.

"Que pasa con los gritos!?" Riveria que bajo a la sala de estar le pregunta confundida a Elinalise.

"Mirá!" Elinalise señalo a Kaylon.

Luego de voltear y ver a su Dios, se quedó en silencio por un rato.

"Es la vejez no Kami-sama,? Parece que los cientos de millones años que viviste te han empezado a afectar.!" Riveria, miro a su Dios con lástima.

"Oh ya veo la menopausia y esas cosas de ancianos, es una lástima, tenemos que contratar alguien que lo cuide?" Elinalise también miro con lástima a su Dios, y dio una sugerencia.

La cara de Kaylon debajo del sombrero de paja, ya estaba tan oscura como el fondo de una olla.

"Cállanse idiotas, por si no sabían les recuerdo que una de ustedes ah vivido por más de 8 décadas y la otra más de dos siglos!" Kaylon replicó con enojo.