Solo una noche - Winrina

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Celos
...

Después de una larga sesión de preguntas y burlas, entraron a la casa y Giselle comenzó a preparar hamburguesas, con ayuda de Ningning y Yeonjun.

— ¿Cómo dormiste? — preguntó Minjeong, viendo a Jimin a su lado. Ella la miró e ignoró olímpicamente a la pelinaranja —. Me olvido que a veces es como si hablara sola.

— Ajá.

Minjeong frunció el entrecejo sin comprender el cambio de humor de la pelinegra, es decir.. estaban bien en la mañana, ¿no?

— ¿Por qué eres así? — preguntó. Jimin se volteó a mirarla con confusión en sus ojos, los cuales lucían más oscuros que de costumbre.

— ¿Así como?

— No sé, a veces fría y sin emociones y otras veces tan simpática y tierna.

Jimin apartó su mirada y alzó los hombros sin decir nada más. Minjeong soltó un suspiro y decidió darle fin a la conversación.

Jimin.

Estaba ardiendo en enojo.

Desperté y lo primero que pude ver fue como Minjeong se iba caminando con una chica bastante apuesta mientras le daba esa sonrisa estúpida que suele poner cuando coquetea, ¿por qué te irías con alguien que no conoces?

“Suelo venir a Hawaii una vez cada mes, vengo aquí para distraerme del trabajo”.

Tal vez no era la primera vez que veía a esa chica y estaba jugando al enamoramiento conmigo. Claramente yo no siento nada por Minjeong, ¡Pero, vamos! Esa chica solamente me molestaba, ¿quería burlarse de mí? Seguramente era eso.

La miré de reojo y ahora texteaba algo en su teléfono mientras comenzaba a crecer una sonrisa en sus labios. Rodé los ojos y me levanté de mi lugar, pude sentir como me miraba. Subí hacia nuestra habitación y me senté en la cama, necesitaba respirar si no quería tener un mal día lleno de mal humor.

— ¿Se puede saber que te pasa? — preguntó mientras entraba a la habitación.

— ¿A mí? No me pasa nada — respondí, intentando sonar convincente. Minjeong entrecerró sus ojos y me miró como si tratase de descifrar algo —. Tú estás de paranoica.

Se cruzó de brazos mientras detallaba mi cara. Aclaré mi garganta, algo incómoda y ella desvió su vista.

— Luces bastante diferente a como lucías hace algunas horas— murmuró.

¿Será por qué hace algunas horas no te fuiste con cualquiera que se te cruce?

— Estás exagerando — la miré con confusión y ella se sentó frente a mí —. ¿Que haces?

— Estás celosa — afirmó.

Me puse de pie rápidamente y ella imitó mi acto. ¿Yo celosa? Claramente eso no era cierto, solo no me agradaba que jugara de cupido y luego se esté viendo con otras.

— ¡No estoy celosa! — exclamé rápidamente. Minjeong levantó una ceja —. Ni siquiera me importa que te hayas ido con esa.. esa mujer.