8. Floreciendo (Final)

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El aroma del mar y la naturaleza inundaban sus fosas nasales; al menos fue lo que ella pudo deducir, mientras volvía lentamente en sí. Sentía como si hubiese estado en un profundo sueño durante mucho tiempo, aunque sólo había transcurrido unas horas.

Lentamente abría sus ojos, tal imagen le traía recuerdos. Notó que estaba an alguna habitación de hospital. La incertidumbre empezó a causarle efecto, por lo que necesitaba aclarar muchas dudas.

Casi como si leyeran su mente, una puerta se abrió dejando ver al capitán Rozzen.

- ¡Violet! Qué bueno verla despierta.

- Capitán... Gracias. ¿Qué ocurrió?

- Tú y el Contralmirante fueron heridos esta madrugada. Quedaron inconscientes y los trajimos aquí.

- Él está bien... - Mencionó Jeremy, al notar un dejo de preocupación en el rostro de la rubia. - ...Ahora debe recuperarse, aunque quizá tarde un poco más que tú. Probablemente unas semanas más.

- Bien. ¿Qué pasó con la Reina?

- Ella y su familia ya están reunidos. Hasta ahora, todo parece volver a la normalidad poco a poco. Mañana partirá de regreso el barco a Leidenschaftlich.

- ¿Tan rápido?

- Sí. El mismo contralmirante dio la orden, luego de despertar. Ya no hay nada que hacer aquí.
Si se siente lista, puede volver con nosotros mañana.

Violet se sintió algo confundida en ese momento.

- Bien, piénselo. Háblelo también con su doctor. Mañana vendré temprano por si decide regresar.

- Gracias por todo, capitán.

- No hay de qué. Nos vemos.

El hombre se despidió con una sonrisa, dejando a Violet preocupada.

No entendía por qué Dietfried había despachado a todos a casa, si él mismo aún estaba convaleciente. ¿Acaso no necesitaba ayuda? ¿Estaría solo durante su recuperación?
Se preguntaba.

Violet empezó a sentirse nerviosa, al recordar lo ocurrido la noche anterior. Ese miedo que recorrió todo su cuerpo al ver a Dietfried ensangrentado, era algo que no quería volver a experimentar nunca más.

Tampoco quería perder la oportunidad de volver a ver su sonrisa con ese toque de arrogancia. No quería olvidar la manera en que caminaba hacia cubierta vigilando todo y admirando el atardecer; ni el movimiento de su cabello siendo llevado por el viento.

No quería seguir perdiendo esos detalles. Aunque no entendía del todo sus razones. Lo más probable para ella, era que los sentimientos que había empezado a desarrollar por Dietfried, iban creciendo conforme pasaban los días y eso le asustaba.
Estaba volviendo a querer a alguien, aunque esta vez de seguro no sería correspondida.

Otra vez volvería a perder.

Al concluir eso, pensó que lo mejor sería volver a su hogar junto a Hodgins y el resto. Jugar con su sobrina...
Volver a sentarse tras una máquina de escribir y olvidarse de lo ocurrido con Dietfried en ese viaje, parecía ser lo más adecuado y razonable en ese momento.

...

La cena supo algo agridulce para Violet. Se sentía muy sola y nostálgica en esa habitación poco iluminada. Seguía pensando qué decisión tomar al día siguiente. Incluso había comentado al doctor la posibilidad de irse, quien le dijo que podía hacerlo si lo deseaba. Sólo debía estar pendiente y guardar reposo.

El Mar En Tus Ojos (Dietfried X Violet) - Violet Evergarden Donde viven las historias. Descúbrelo ahora