Capítulo 4

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Después de una cálida visita a la casa de la amiga de su tía, Luke y Elaine decidieron aprovechar el resto del día para explorar los alrededores de la localidad. Recorrieron algunas tiendas y disfrutaron del fresco ambiente en el parque del centro, culminando el día con la serenidad del atardecer.

Todo transcurrió de manera tan placentera que Luke se sintió sumamente confortado durante su estancia.

Así transcurrió la jornada, tan apacible que logró liberar por completo su mente de preocupaciones.

Al caer la noche, vaciló sobre si debería o no ir a la tienda de antigüedades. Aunque se había decidido en adquirir aquella peculiar llave que llamaba su atención, no deseaba encontrarse nuevamente con el castaño.

Por lo que, pegando un suspiro, renunció a esa idea y prefirió solo dirigirse a casa.

"No quiero volver a soñar con él", pensó.

Tenía la esperanza de que esa noche sería tranquila y reconfortante. Después de todo, no creía que el extraño sueño que había experimentado se repitiera. Cada día traía consigo sueños diferentes, y esperaba que lo anterior fuera solo un producto fugaz de su mente, influenciado por el cambio de entorno, sin motivo alguno para preocuparse.

Desafortunadamente para Luke, las cosas rara vez eran tan sencillas como uno espera.

Aquella noche, el de melena plateada se revolcaba entre sus sábanas, moviéndose de un lado a otro, pero en última instancia, estaba tranquilo.

Todo transcurría con normalidad.

Hasta que un fuerte golpe de viento sacudió la ventana de su habitación, despertándolo en medio de la noche. Con cansancio, se levantó medio dormido para cerrarla, arrastrando sus pies mientras se tallaba los párpados.

Pegó un gran bostezo antes de volver a caer boca abajo sobre la suave cama.

Sin embargo, justo en ese momento, escuchó pasos audibles dentro de su habitación, lo que hizo que frunciera el ceño adormilado.

―Oiga... ―replicó― Aquí no hay niños para asustar y recolectar gritos ―colocó su almohada sobre su cabeza en un intento de bloquear el ruido. Aún medio dormido, creía que todo aquello era producto de su imaginación― ¡Jódete, no me asustaré!

Pero conforme los pasos se acercaban, el sueño comenzaba a desvanecerse.

En un rápido movimiento, Luke se cubrió con las sábanas pues, por dentro, estaba empezando a asustarse.

―Dios, sé que he podido superar varios problemas hasta ahora, pero por favor, ya no quiero ser tu mejor guerrero... ―lloriqueó cuando unas firmes manos habían cogido el principio de la sábana― ¡Suéltala! ―protestó, tironeando de la tela sin abrir los ojos.

Pero la fuerza que el otro ejercía era mucho mayor. Bastó solo otro jalón más para que la sábana cayera al suelo, dejando expuesto al esbelto joven.

Luke, no dándose por vencido, decidió a escapar.

Buscó algo que pudiera usar como defensa, pero antes de que pudiera siquiera levantar algo, un cuerpo cayó sobre él, aprisionándolo y apretando sus muñecas con sus grandes manos.

Su cordura se fue al carajo cuando sus ojos no pudieron evitar abrirse y encontrarse con unos ojos esmeraldas que lo observaban expectante.

―Pero q-qué.. ―sintió cómo se formaba un nudo en la garganta. Estaba perplejo, observando la figura que lo tenía atrapado bajo su peso― ¿Qué carajos haces aquí? ―logró articular ceñudo, moviéndose con intenciones de quitárselo de encima.

Fantasy Land || Luke x Andrew || +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora