La Tierra Del Miedo

Capitulo 3: Sueños o Pesadillas

Es posible que no recordemos haber soñado, pero se cree que todos soñamos entre 3 y 6 veces cada noche. Se cree que cada sueño dura entre 5 y 20 minutos. Alrededor del 95% de los sueños se olvidan al levantarse de la cama. Así que cuando tengas un sueño que recuerdes, anótalo solo al levantarse de otra forma se perderá entre las memorias y nunca volverás a recordarlo , o quizás si , quien sabe

- ¡AAH! -el grito de Daiki se escuchó por todo el cubículo pero no pareció levantar a nadie- ¡me dormí!

Por supuesto que no , no había nadie durmiendo a las 12 del mediodía , de hecho todo el mundo debería de estar almorzando , excepto por el joven de Daiki , quien había estado despierto toda la noche anterior esperando este día y tuvo que rendirse ante los fríos barrotes de hierro. Las tripas de Daiki sonaron como un categoría 9 y casi por instinto se dirigió al pequeño almacén que todavía no había revisado. Abrió la puerta que crujió como si se fuese a desprender y las criaturas de la oscuridad huyeron despavoridas como si la luz de cristal semi-roto del techo fuese un francotirador

- Latas de conserva , espero que no tengan mantequilla

Daiki tomó una de las latas mientras pretendía entender lo que uno de esos idiomas extranjeros ,que prefieren símbolos a letras, decía. Pero gracias a alguna persona inteligente al menos los números conservaban su notación en todas las lenguas , por lo que el joven si pudo entender algo.

-Esto lleva caducado 9 años -dos golpes fuertes en la puerta frenaron sus intenciones de enfermarse-

- Hey cadete , mejor sal

Era una voz femenina quien llamaba a la puerta tan confiadamente , el joven dejo la lata encima del almacén sacudiendo las termitas , arrastró la mochila que obstruia la puerta y la puso encima de la cama , se acercó de nuevo y abrió la metálica para encontrarse con una hermosa mujer de pelo rojo que reconoció al instante

- ¡Hey! tu eras la otra normal en la formación -refiriendose a qué era una de las 3 personas que estaban erguidas y sin llorar o temblar en la formación- ¿qué le pasaba a aquellos flacuchos?

- ¿Tienes hambre? , escuché tu grito hace un rato y supuse que ya notaste que la comida está vencida

Ella era del tamaño del joven , lucía un corte de pelo atrevido, justo a la altura del principio de su cuello, pero lo que más llamaba la atención era el vibrante color rojo que parecía encenderse con cada movimiento. Su aspecto era dinámico, con un cuerpo tonificado y atlético . Vestía con la camiseta de uniforme , el pantalón ajustado resaltaba su amplia cintura, acentuando una figura dominante

- No eso fue porque...-contuvo sus ganas de dar explicaciones porque sintió que no era lo más conveniente para decirle a una chica que acababa de conocer- ... si tengo hambre , ¿alguna idea?

- Ven conmigo , hay una cafetería en el centro que te va a gustar , mi nombre es Justice por cierto , pero llamame Jus , vamos no hay tiempo que perder , la noche llega más rápido de lo que parece

Daiki hizo caso , cambio sus ropas por el uniforme que cubrió con su hoody , se tomó su tiempo para ponerse la camiseta , quería que la chica viera su cuerpo , cuando miró por la esquina del ojo para ver su reacción la chica ni siquiera estaba mirando , había sacado el móvil. Un poco avergonzado termino de vestirse , tomó un poco de billetes viejos que tenía en un bolsillo de su mochilón y tomo el aviso de ese extraño fantasma.

- Yo soy Daiki -dijo alzando el papel para mostrarlo- quiero a este

La chica alzó ma cabeza de la pantalla , miró al papel y volvió a bajar la cabeza , está vez para reírse un poco , dejando ver qué sus colmillos estaban un poco pronunciados , al volver a subir su rostro había algo diferente en sus ojos , un brillo rojo , algún instinto asesino que asustaría a cualquiera

- Creo que me gusta -pensó el joven

- Tu y yo nos vamos a llevar muy bien Daiki

Los dos salieron caminando sin mucha prisa y no hablaron mucho más durante todo el camino , de todos modos el centro quedaba cerca de la Estación y llegaron en 4 minutos. La fachada de la cafetería estaba llena de publicidad y carteles de luces , que estaban apagadas o rotas , aunque se distinguía el nombre del local: "Gatos y Cafés" , las paredes estaban salpicadas con grafitis lumínicos con consignas ofensivas , se leía "Putos Capitalistas" .Un toldo de fibra óptica desplegado sobre la entrada proyectaba patrones cambiantes de colores, recordando a los transeúntes que allí dentro aguardaba un escape de la sociedad actual.

- Bienvenido a la mayoría de edad -dijo Jus mientras miraba ,con las manos en la cintura , la pequeña cafetería

- He pasado por aquí alguna que otra vez , pero no recordaba que estaba aquí

Los dos entraron y la cafetería parecía un casting de película americana , era muy variopinta , sobre todo llamaba la atención la camarera , vestía de trabajo por supuesto , destacaba por tener rostro de gata , aunque su cola no asomaba por ningun lado , la raza híbrida era extraña en el sur , pero los clientes estaban acostumbrados.La iluminación principal proviene de luces LED incrustadas en los paneles del techo, arrojando destellos al pasar por las zonas de asientos , aunque algunas estaban rotas. En un rincón, una barra de café con toques de metal y madera , atendida por otro híbrido gato. Daiki y Jus tomaron asiento con prisa , el lugar estaba lleno.

- Respecto a tu pregunta de antes , supongo que nadie te había contando , hace años ya que los defensores de distrito somos un suicidio colectivo , mandan a todos los superhumanos con mayoría de edad a ser asesinados por las amenazas , los que se quedan en sus cubículos mueren de hambre y solo unos pocos que sobreviven obtieben su mísero salario , que da aveces da para comer y a veces no , solo verte me basta para saber que eres uno de esos igual que yo , así que mejor estar unidos.

La información pasó por la cabeza de Daiki sin mucha importancia al principio , tan solo había retenido el hecho de que la chica quería que estuvieran unidos. Luego comenzó a reflexionar.

- ¿Porqué no me entero de esto hasta ahora?

- Que desean -dijo la camarera que se acercaba con el libreto amarillo para anotar-

- ¡UN BOCADILLO DE JAMÓN! -dijo el joven emocionado sin tan siquiera haber mirado la carta , aunque para su sorpresa la camarera asintió y anotó-

- Yo un expreso y carne picada , gracias -volvió a la conversación entonces Jus- normalmente estás cosas son un secreto a voces , debido a la herencia , todos nuestros padres son también defensores de distrito y son quienes se encargan de contar este tipo de cosas justo antes de abandonar a sus hijos a su propia suerte , pero ya asumí que como yo , tú tampoco tienes padres

Las cosas que tenían en común no pagaban de aumentar y la conversación siguió sobre temas un tanto banales mientras la comida llegaba y se disfrutaba como el mayor manjar de sus vidas.

- Es el momento -pensó el joven- oye tienes novio?

- No , soy lesbiana y tú?

El terror corrió por cada parte del cuerpo de Daiki como nunca en su vida. No era la idea de ser rechazado o alguna especie de pensamiento retrógrada, tan solo estaba asustado porque la idea de que la persona más genial que había conocido , nunca iba a ser nada más que su amiga le estremecía el cuerpo , cuántas personas hay así en esta sociedad , en 16 años no había conocido a ninguna. La noche cayó y el silencio en la mesa duró el tiempo suficiente como para sentirse

- ¿Estás bien? - preguntó Jus

- Es hora de ir a por el fantasma

Había alguna otra forma más abrupta de cambiar de tema , probablemente no , pero entendiendo el apuro y sonriendo brevemente, Jus pidió la cuenta y se puso de pie. Después de pagar una razonable cantidad de dinero Daiki también se puso de pie.

- Al lío -resguardo su emoción por el primer día de trabajo en una cara seria y echó a andar junto a Daiki sin saber que más tarde ese mismo día , el acontecimiento que lo terminaría sería cuánto menos horroroso

_A esa misma hora en algún lugar del bloque 2_

Una sombra de profundos agujeros rojos en el deformado rostro cobró forma de entre la oscuridad del rosado cuarto de una niña

- Hora de comer