Love Of My Life ♡ Wriolette

06.-

Ellos estaban felices de volver a verse pero Neuvillette había olvidado que su amiga seguía preocupada por el y que no podía volver a desaparecer así que terminó convenciendo a Wriothesley de llevarlo a su departamento para que conociera a Furina y se quedara con el.

Lo gracioso fué que Wriothesley hizo hasta una maleta para irse a vivir con el por un tiempo, metió un montón de ropa y algunas cosas más. Era como irse de vacaciones, hace mucho tiempo ya que no hacía eso.

Pasar de una casa pequeña para una persona a un departamento enorme fué extraño, le sorprendió la cantidad de espacio que había para caminar y las habitaciones, una para dormir, otra para trabajar, un baño enorme con una ducha y una bañera, una habitación extra y la gran cocina. Estaba ansioso por dormir con el, Neuvillette le dió un espacio para dejar su ropa y en poco tiempo ya se había instalado, la cama era mucho más cómoda que la de Wrio y más grande pero eso no quita el hecho de que la otra cama igualmente era buena.
Al llegar la noche pidieron comida pero nada era tan bueno como la comida que el le había preparado cuando estuvo mal.

Después de eso fueron al balcón a ver la ciudad de noche, llena de luces y movimiento, Wriothesley había olvidado que la ciudad era así.
Ahí estuvieron hablando y riendo hasta que a ambos les dió sueño, al acostarse a dormir se abrazaron y se dieron unos cuantos besos, ahora vivía como un felíz enamorado, nunca había amado tanto besar a alguien la sensación que tenía al hacerlo era indescriptible, su cuerpo se tensaba un poco sintiendo un poco de vergüenza y cuando Wriothesley le daba su toque especial sentía como rápidamente se acaloraba.

No se limitaban a los labios, un beso apasionado incluía más cosas hasta besó su cuello y mordió suavemente su oreja, ambos deseaban probar nuevas cosas.
Sus manos se posaron en su cintura sobre la ropa pero rápidamente se escurrieron debajo de la tela tocando la piel.

—¿Qué haces? —Preguntó Neuvillette riendo, incluso le daba cosquillas.

—Le doy un poco de emoción al beso.

Sus labios no se separaron, seguían besandose y las manos de Wriothesley seguían tocando el cuerpo del chico pasando por su espalda, su abdomen e incluso en su cadera un poco debajo del pantalón.

Pero era hora de dormir aunque ambos deseaban seguir, Neuvillette se acercó más abrazandolo también con las piernas, Wriothesley se pegó más y durmieron así, los dos pensaban en los besos y que a ambos les dió vergüenza.

                                   (…)

Pero la felicidad no es eterna y no se puede alterar el orden natural de las cosas, Wriothesley no estará vivo por mucho tiempo y en algún momento ellos volverán a estar separados. Por ahora están viviendo un sueño pero pronto volverán a ese duro infierno de vivir separados.

¿Cómo te sentirías si la persona que está destinada a estar contigo no puede estar contigo?, para Neuvillette eso no podía pasar ya que las historias que había visto siempre decían que terminarían con un final feliz, aún así quizás ese no era el caso, el estaba condenado a pasar por un gran sufrimiento y a hacer sufrir a los de su alrededor.
Las estrellas los habían reunido y también los separarían, las estrellas siempre han sido testigos de su dolor y eran quienes intervenían en las situaciones difíciles, es decir, las estrellas habían revivido a Wriothesley y curado a Neuvillette pero pronto serían quienes le quitaran la vida también. 

Cuando Neuvillette volvió al trabajo todos quedaron sorprendidos al ver su ánimo, tan positivo, tan alegre, aunque era bueno verlo así le preocupaba a todos su salud mental, mientras el trabajaba Wriothesley se quedó en el departamento pero tenía permitido salir a comprar cosas si lo necesitaba, para no aburrirse aprovechó de cocinar un postre y con el dinero que Neuvillette le dejó pensó que sería bueno darle un regalo.

Finalmente Furina pudo descansar un poco de su preocupación, Neuvillette había vuelto a la normalidad y aunque le preocupaba el cambio de humor quería disfrutar de que su amigo estaba mejor y como siempre lo hacían almorzaron juntos, trabajaron juntos, compartieron risas y al llegar la hora de volver a casa el le pidió un momento para hablar, quería contarle algo.

Aunque no le dijo la parte sobrenatural le contó que tenía pareja y que quería que se conocieran, ella quedó sorprendida, su amigo nunca había estado tan emocionado por una pareja, generalmente era para crear rumores que beneficiaran a la empresa y duraban muy poco, el nunca parecía estar realmente enamorado pero ahora podía notar algo distinto en el, ella aceptó, estaba feliz de conocer a la persona que se ganó su corazón.

Fueron juntos al departamento, cuando llegaron al abrir la puerta se pudo sentir un buen olor, el postre, Furina quedó encantada ¿Cómo que esa pareja sabía cocinar postres? Aprobaba eso de momento, quería ver cómo era esa persona, algo que ella sabía aunque nunca le habían dicho era que a Neuvillette nunca le interesaron realmente las mujeres, quizás por eso sus parejas nunca duraban o no había amor.
Wriothesley apareció dejando flores en el florero de la mesa, Furina se sorprendió. ¿Cómo es que se consiguió un tipo tan guapo?, ¿Esto es real?.

El pelinegro corrió a recibir a Neuvillette con un abrazo y un tierno beso, la chica miró con atención, estaba segura de que de verdad se amaban, lo podía notar.

—Ella es Furina, mi amiga y también familia —Dijo presentándola.

—Hola —Saludó con vergüenza.

—Hola Furina, encantado en conocerte ¿Sabías que Neuvillette es todo un romántico? Me invitó a quedarme unos días aquí y ... al dormir siempre me abraza como si fuera un peluche.

—¿D-duermen juntos?.

—Sí, oh mi nombre es Wriothesley.

—Wriothesley...tienen la misma cicatriz en el rostro.

—Si...nos une de alguna forma.

—¿Furina te quedas a cenar? —Preguntó Neuvillette para que dejaran de hablar.

—Si no es una molestia.

—Hay suficiente comida para los tres, ya está todo listo y de postre he preparado una pequeña torta.

—Neuvi...creo que te has elegido a alguien muy especial —Susurró sorprendida —Ah y porsupuesto, los apoyo.

Los tres disfrutaron de la comida y en especial los postres, Wriothesley había dado una buena impresión al ser un chico tan agradable y respetuoso, en ningún momento hizo algo molesto y su simpatía sorprendió a Furina aunque ella seguía sorprendida de saber que Neuvillette lo había traído y el, que nunca compartía su cama, estuviera durmiendo con otro.

El día sábado Neuvillette quería comprobar algo pero necesitaba ir solo así que Wriothesley se quedó en casa una vez más pero no parecía molestarle.
El manejó hasta el cementerio, ahora que el pelinegro estaba vivo no sabía si su tumba seguiría intacta pero algo llamó su atención, estaba ahí solo que...la fecha había cambiado, el año en el que murió era el año actual eso significaba que Wriothesley moriría pronto.

No sabía cuándo ni como pero definitivamente no estarían juntos por mucho tiempo.

Su tiempo se acababa, Neuvillette miró el cielo mientras el viento soplaba y sacudía su cabello, tuvo una sensación extraña y sintió como alguien le tocaba el hombro.

—¿Disculpa?.

—Perdón si lo molesté pero se le cayó esto.

Las llaves del auto y un papel, la persona se fué y el chico leyó el papel, no recordaba haber llevado alguna nota así que quizás era de alguien más o algo así.

"Para traerlo a la vida por completo debes dar algo de valor, el dinero no funciona nada material lo hará..."

Al leer eso supo que era para el.
¿Entonces para que Wriothesley volviera por completo debía dar algo a alguien?, ¿Pero a quién?, nunca había oído algo así, no conocía a nadie como para darle algo, ni siquiera sabía que debía dar, la única respuesta era que con el tiempo se sabría todo, pronto sabría a quien debía ofrecer algo de valor y como.

Su historia de amor estaba condenada al fracaso.

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