Intento 13.5

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Septiembre 9, viernes, 2022

Estaba aburrido, la clase de historia apenas iba por la segunda hora pero ya quería irse a casa; nunca imaginó que estar sin Félix sería tan difícil, no compartían clases ese día pero siempre se mandaban mensajes de texto hasta la hora del almuerzo.
Iba a quedarse dormido sino pasaba algo interesante, se agachó un poco para acostarse en su pupitre y de pronto su celular sonó anunciando un nuevo mensaje. Abrió el texto y se encontró con Lee Minho siendo el emisor de este.

Hola, Hyunjin. Estuve pensando que hoy no vino Félix así que ¿Quieres que almorcemos juntos?

Tuvo que contener sus ansias de gritar, se enderezó de golpe y su silla hizo ruido, los presentes en el aula lo miraron con extrañeza; pensó en qué respuesta podía dar, no quería limitarse con un simple "Si" o un "Claro", necesitaba comenzar a conquistarlo sin miedo. Tomó aire y abrió el teclado de su móvil, no era de los que mantenían una conversación en Instagram pero al no tener el número de Minho debía resignarse un poco.

"Me encantaría" lo borró y volvió a tratar "Claro que quiero que almorcemos juntos, sería un gran honor" de nuevo lo eliminó "Es una gran idea ¿dónde nos encontramos?" estaba siendo más complicado de lo que pensaba "¿Seguro?" lamentaba su léxico tan pobre.
Cuando menos se dio cuenta había pasado media hora desde el mensaje, sentía una presión impresionante, quería consultarle a su mejor amigo cómo responder pero no podía.

Estaba pensando eso mismo, sería bueno que pasaramos más tiempo juntos. No creo que la cafetería sea un buen lugar, tengo la llave del salón de arte si quieres que sea más privado.

Su corazón latía a mil por hora, salió del chat cuando vio el "visto" al final de su texto; creyó que tendría más tiempo para preparar su mente pero ahora estaba sucediendo algo que jamás logró en sus intentos pasados.
La situación escalaba tan rápido que no sabía como reaccionar; sin embargo, no iba a echarse para atrás ahora que empezaba.

Tengo una idea, ¿Qué te parece encontrarnos en el campo de soccer? Conozco un buen lugar.

Okay

Contó los minutos que faltaban para el almuerzo, cada segundo revisaba su teléfono para ver cuánto había pasado; lamentaba mucho no poder hacer que fuera más rápido y que su profesor no parara de hablar de algo que ocurrió hace miles de años (según él).
Para calmar sus ansias se puso a hacer garabatos al final de su cuaderno, hizo una nube, un gato, un par de corazones y estrellas y casi escribió el nombre de Minho pero supo controlarse.

El timbre sonó y casi salió corriendo al encuentro, de no ser porque traía mochila hubiera hecho tiempo récord en recorrer la escuela.
No había chicos jugando por ahí así que caminó hasta una de las porterías, era agradable estar ahí, el clima era caliente pero soportable. Se sentó y tomó su celular para verificar si había noticias de su compañero; miraba en varias direcciones en busca de alguna señal, escuchó pisadas aproximándose y fingió demencia para no verse tan desesperado.

— ¿Hyunjin?— lo llamó y este miró con una sonrisa— ¿Te hice esperar?

— Hola, Minho. Acabo de llegar, no te preocupes— se levantó y volvió a sonreír— ¿Dónde está tu lugar secreto?

— Dime un número del uno al tres.

— ¿Dos?

— Perfecto, vamos— comenzó a caminar y Hyunjin lo siguió.

La escuela había sufrido de una ampliación en el pasado, por lo que el ala sur había quedado casi sin uso, algunos salones se seguían usando pero era raro que hubiera almas por ahí, sobre todo en planta alta donde estuvieron antes algunos clubes. No era un área prohibida pero los alumnos no se sentían atraídos a explorar.
Ellos caminaron hasta un salón que estaba marcado como "sala de música". Minho sacó una llave de su mochila y entraron, todo estaba cubierto de polvo pero no era incomodo, al centro había un piano viejo y las bancas estaban sobre las mesas, el único sitio que parecía cuidado era el escritorio.

SAVE HIM ||HYUNHODonde viven las historias. Descúbrelo ahora