deep web ➾ kris

capítulo seis

"Se han enterado de todo." Dijo Zitao por el teléfono.

Kris apagó el motor del carro rentado.

"Explícate."

"Luhan me llamó." Empezó. "Me dijo que mientras pasaba por la oficina de tus jefes, estos hablaban sobre ti. Lo saben todo."

"No me jodas."

"Están furiosos."

"Bueno, es tan en su derecho." Kris dijo burlón.

"Kris, esto es serio." El tono de Zitao era duro. "Yifan, están en tu casa justo ahora."

"¿Qué casa?" Kris empezó a alarmarse.

"Donde te quedas en Corea, esa casa."

Los pulmones de Kris se quedaron sin aire un segundo, el celular cayó en cualquier parte del auto. Estaba en problemas. Sus ojos viajaron a la guantera, sin dudarlo un segundo, sacó la pistola que escondía ahí.

Salió del auto y escondió el arma en sus pantalones. Respiró hondo. Por un momento, su mirada estuvo tensa, pero ahora estaba más furiosa y potente que nunca. Subió las escaleras del edificio hasta llegar a su cuarto alquilado.

Abrió la puerta lentamente, sus ojos vieron lo que más temía en estos momentos. Jeri se encontraba atada a una silla y con cinta tapando su boca, pero eso no era lo peor, un hombre le apuntaba con una pistola en la cabeza.

"¿Qué haces aquí, Huan?" Fue lo que pudo articular.

El hombre sonrió cínicamente. Kris podía notar su enojo en los ojos.

"¿Qué hago aquí? Hmm... he venido a cobrar todo lo que nos debes." La pistola apuntó a Kris, pero de inmediato volvió a Jeri. "Esta chica es muy linda por cierto, podría divertirme antes."

Kris miró a Jeri. La chica no podía dejar de llorar y toda ella estaba temblando. Estaba aterrorizada. Su piel se erizaba al sentir el cañón sobre su cabeza.

"Déjala."

"¿Piensas dejarla huir también?"

"No." Dijo seguro. "La he vendido ya a un australiano."

"Un australiano eh... No te creo."

"Es tu problema. Pero esa chica es dinero."

"Suenas como si quisieras salvar su vida." Sonrió. "No me digas que hay sentimientos de por medio." Kris apretó la mandíbula. "Si es así, vaya, será más divertido matarla frente tus ojos."

"La he vendido." Repitió.

"Hmm... pero que bonita perrita tenemos aquí." El chico pasaba la punta del cañón por todo el rostro de Jeri. "Tiene cara de hacerlo bien..."

"Déjala en paz, Huan." El chico lo ignoro por completo. "¡Qué la dejes en paz!"

Huan enfureció más al escuchar el grito de Kris. Se alejó de ella y tomó bruscamente de la camiseta a Kris, colocando la pistola en su cabeza.

"No me grites, estúpido." Advirtió. "¿No te das cuentas que son tus últimos momentos?"

"¿Por qué no gastarlos gritándole a un hijo de puta como tú?"

Huan hizo una mueca, en ese momento cargó el arma, listo para disparar. Jeri soltó un grito, que apenas se escuchó por la cinta. Pero a diferencia, Kris sonrió, esa sonrisa sádica y malévola que solía hacer.

"¿Por qué sonríes?"

"Por esto." En ese momento, con un ágil movimiento, tomó el cañón del arma de Huan y lo apuntó al propietario y con una mano sacó su arma. "¿Creíste que era tan idiota para estar sin un arma?"

"E-espera..."

"¿Quién es el que malgasta sus últimos momentos ahora?"

"No lo harás."

"Lo he hecho antes, ¿por qué no contigo? un idiota que se cree mejor que los demás pero solo es el perrito faldero del jefe."

"Eres un traidor."

"A estas alturas deberías tener muy claro que nadie es fiel en este negocio."

Huan forcejó, pero fue inútil, las dos armas apuntaban a él.

"Si me haces algo, ellos irán tras de ti."

"Que lo hagan, puedo con ellos también." Kris miró a Jeri. "Cierra los ojos."

Jeri acató la orden rápidamente, lo único que pudo escuchar después, fue el sonido de una arma disparando. No abrió los ojos hasta que sintió como Kris la desataba y quitaba lentamente la cinta de su boca.

"Y-yo... Tú acabas de-de..."

"No digas nada, Jeri." Dijo y la tomó entre sus brazos. "Vámonos de aquí, no tenemos tiempo."

____
Emily ©