Stuart Prescott y su hermana, Maddy Prescott, viven en el lado sur de Chicago y su vida se pone completamente de cabeza cuando se acercan a la familia Gallagher.
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CHAPTER FOUR; ¡¿Que mierda con los Jackson?!
ya eran principios de Septiembre lo que significaba una cosa, comienzos de cases y el comienzo de clases solo significaba una cosa en la casa Prescott, desastre puro y se podía notar en cada pequeño milímetro de la pequeña casa
—¡ya llegamos familia!— grito Mickey entrando a la casa de los hermanos Prescott —y trajimos Donas que le robamos a un idiota
—oh ¡Genial!— Sonrió Maddy saliendo del baño con una toalla taponando su cuerpo y dejando su pelo suelto empapado dejando que todo el suelo se moje a su paso, llego hasta donde estaban los hermanos Milkovich y dejo un beso en la mejilla del chico —cuida a Nina
—¿Nina?— Pregunto confundido deteniendo a su hermana con un seño fruncido —Se te cae la toalla ve a cambiarte
—La bebé— Maddy señalo a su hermana que recién tenia algunos meses, estaba vestida con la ropa vieja de Maddy, Maddy debía tener ocho cuando la usaba así que a la Bebé le quedaba gigante —y no tengo tiempo, tengo que hacer el desayuno y el almuerzo para Stu y Mandy
Mandy se acerco con Nina en brazos y le mostro su bolsa que tenia dos donas de la caja y una bebida que la mayor en la sala no reconoció —Tengo mi desayuno
—Dame eso— Mandy le paso la bolsa y Maddy la tiro a la basura —No bajo mi supervisión, tienes catorce estas creciendo, necesitas alimentarte bien— la reprendió con su dedo sacando el pan lacteal de la heladera —¿Con o sin bordes?—
—Con— respondió la chica balanceando a la bebe que había empezado a llorar —No se como puede hacer esto tu madre, yo no podría tener un hijo y no importarme que le pase
—También se robo nuestro dinero de cuatro meses— Maddy apretó sus labios en una sonrisa sarcástica —Así que olviden que los ayude con las cuentas en su casa este mes
—Esta bien Madds— Mickey le dio una pequeña sonrisa —Nosotros nos encargamos