~ ᴀ ᴛᴜ ᴍᴇʀᴄᴇᴅ ~

CAPITULO V

General pov

Nene había logrado captar la atención de Yugi Amane, el temido líder de la mafia, quien, cautivado por su presencia, se dirigió hacia su ubicación. Mientras tanto, Sumire, la esposa del sexto líder de la organización y una de sus manos derechas, observaba con desprecio a Yugi. Ante la pregunta de este sobre Nene, Sumire respondió con frialdad.

— Ella es una amiga que esta de visita en la ciudad. Canceló su reservación en el hotel y planea quedarse con nosotros durante dos noches antes de buscar otro alojamiento.

Yugi se acercó a Nene y, sin revelar su nombre, tomó su mano y depositó un beso en ella. Con elegancia, Nene respondió: "El placer es mío." Luego, dirigiéndose al sexto líder, Yugi le indicó que no se marcharan después de la reunión, ya que necesitaba discutir algunos asuntos importantes con ellos.

Cada uno tomó asiento y se acomodó en la sala de reuniones. Yugi comenzó a exponer cómo una empresa que solía colaborar con ellos volvería a ofrecer sus servicios para blanquear dinero de la mafia, y cómo el dueño de dicha empresa ahora formaba parte de la organización del crimen. En ese momento, Nene, en sus pensamientos, murmuró: "Otra cosa más que Agregaré a la lista de cosas que voy a denunciar una vez que salga con mi Aoi."

Yugi continuó explicando los beneficios que esto traería para la mafia, pero fue interrumpido por el quinto líder.

— Vaya, Yugi, realmente nunca escuchas mis advertencias. Espero que esto resulte bien y no te suceda lo mismo que con...

Antes de que pudiera terminar su frase, Yugi lo interrumpió con una risa burlona.

—Jaja, quinto, deberías tener más confianza en mí.

Una vez más, Yugi fue interrumpido, esta vez por un joven de cabellera rosa.

El chico de cabellera rosa con un tono de queja en su voz expreso su disgusto.

—Hey séptimo, no entiendo por qué quieres todavía volver a eso.— En eso una castaña de lentes con tono de burla también tomó la palabra

—Es verdad séptimo y si no mal recuerdo fue precisamente eso lo que casi los condena a ustedes.—

En eso Yugi volvió a tomar la palabra

—Ja,ja,ja no tienen de qué preocuparse, yo no soy mi padre y si algo aprendí de él es que no debo cometer sus mismos errores.

El sexto, que hasta ese momento había permanecido en silencio, habló —Entonces, ¿todo seguirá de acuerdo a lo que hemos estado haciendo, número siete? —

Yugi asintió en respuesta — Así es, número seis, y debo agradecerte porque sin ti no habríamos comenzado con este pequeño plan.—

Dirigiéndose a la única persona que no había hablado en lo que iba de reunión, Yugi preguntó.

—¿Qué opinas, número uno? ¿No crees que es excelente?—

—....—

Sin obtener respuesta por parte del hombre de barba que parecía ser ya un anciano, Yugi optó por preguntar otra cosa.

—Y dime, número uno, ¿qué hay de tu nieto? ¿No ha querido tomar la propuesta de volverse parte de la mafia? ¿No ha querido sentar cabeza y tomar tu puesto?—

Esta vez el anciano decidió contestar.

—Sabes cómo es mi nieto, él detesta a su familia por ser de la mafia y ha preferido alejarse de nosotros.—

Con algo de burla, Yugi le responde.

—Oh, así que es eso. Jajaja, no me sorprende, pero estoy seguro de que no tendrá otra opción, al fin y al cabo no puede dejar sus responsabilidades de lado, por más que sea un buen chico.—