[Esmeralda]
"Soy dueña de mis actos, mis pausas y mis movimientos, acompaño mi conciencia bailando ignorando el riesgo, los pasos cuidados no borran el venidero, me atrapan y devuelven al comienzo, un bucle de vida obtengo"
Martes, 4 de enero de 2022.
Había desaparecido.
El moretón ya no se encontraba en mi rostro.
No fue grave… solo rozó mi pómulo.
El sábado a la madrugada llegué a mi casa.
Aún había gente en el salón, escasa, unas diez personas faltaban que se fueran.
Subí a mi habitación y me preparé un baño.
Una hora metida en la tina me relajaron por completo.
Cuando abrí la puerta del baño visualice a Colleen.
Y pasó lo que me imaginaba mientras Kayleb me traía a casa.
Hubo gritos, insultos y…
Maquillaje, tuve que tapar por unos tres días lo que ella hizo en mi rostro.
No se podía exceder. Ella sabía que no tenía que ser una marca permanente, solo una advertencia. Un moretón que se fuera en unos días.
Aún así los tres días se cumplieron y yo seguía poniendo base en esa zona, nadie lo notaría aunque estén a metros de mi cara pero si miraba con detalle, y estaban a centímetros de mi lo notarias.
Deje de verme en el espejo de la entrada.
Deje mi preocupación a un lado.
No preocupada por lo sucedido, me iría de viaje y… el maquillaje no es lo más apropiado para el mar.
Tome mi bolso de mano y avance hasta el auto que me llevaría al aeropuerto.
El trayecto fue satisfactorio, me alejaba de mi casa, una semana de descanso de lo que pasa en la mansión Howard.
Le pedí al chófer me acompañará con mis maletas hasta el punto de encuentro con mis compañeros.
Volvió la tensión a mi cuerpo a medida que me acercaba a ese encuentro.
Elida fue la única con la que he hablado desde la fiesta. No tuve contacto con los demás, y eso me preocupaba.
Vi al grupo, mis compañeros de último año, conocidos con los que compartía clases, conocidos que sabía tenían las mismas materias pero diferentes profesores.
Me despedí de mi compañía, tomé paso hacia ellos con la frente en alto y con mi mejor sonrisa los saludé.
Para perder tiempo miré mis manos, en esos segundos tacones rosados captaron mi atención.
—Obligue a mi hermano a venir… —hablo sentandose a mi lado— bueno en realidad no aceptó mi invitación hasta el último minuto en qué tuvo la iniciativa de venir.
Asentí.
—Muy raro, pocas veces ha venido… pero me imagino porque es esta vez —arqueo una ceja y sonrió divertida.
Mis ojos se abrieron de más causando una risa en ella.
—Es nuestro secreto Esme. —susurro con tono entusiasta.
—¿Qué cosa? ¿A qué te refieres? —ella inclinó su cabeza con ternura— ¿Él té lo dijo?
—No hizo falta… solo lo supe.
ESTÁS LEYENDO
En nuestra realidad [+18]
Teen Fiction-Desafío, lo anhelas. -sonrió- Tal vez... ¿Algo prohibido? ¿Algo que acelere tu respiración y te genere desear más? Porqué esa es la palabra, deseo. Con cada palabra se acercó hasta encerrarme entre él y la pared. -Tú respiración te delata chica E...