Capitulo 8: Ser elegido

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Meses después, y sin poderlo creer, llegó una denuncia en su contra a las manos de Cheon Doona por abuso sexual y tortura.

Pese a las burlas de la policía coreana ante el hecho de que un hombre denunciara por ese motivo a una mujer, Minho siguió con la denuncia con la ayuda de una buena abogada que ofreció su ayuda a pesar de ser rechazada por este último en su confesión amorosa.

La siguiente vez que ya oficialmente la ex pareja se vio fue en el tribunal. Y dado a que Doona se encontraba en la cima de su carrera como escritora, el juicio fue muy mediático.

Para desgracia de la autora de un best-seller, su defensa fue bastante débil. Adjudicándose nada más que el entre comillas placer que experimentó la supuesta víctima que denotó las erecciones y eyaculaciones de la víctima. No obstante, un médico colaborador de la abogada de Minho, expresó en claro que ni una erección ni una eyaculación hacían de un abuso menos violento o apremiante. La única forma de correcta de dar consentimiento era con sí claro, innegable y específico que Minho no dio en todos los actos, por el contrario.

Así fue como la balanza se volteó a favor de Minho y ganó la denuncia, una orden de alejamiento en contra de Doona, y una indemnización de millones de wons que la escritora debía pagarle en el plazo de quince días.

De esa manera, la flamante escritora lo repudió por completo. Pero Minho, simplemente no podía hacerlo por completo.

-¿Qué? ¿Vas a restregarme tu triunfo en la cara? -encaró Doona enfurecida luego de que Minho pidió estar con ella a solas.

-No, solo quisiera que supieras que yo no quería esto para ti.

-No seas estúpido. ¡Me arruinaste!

-¡Pues debiste pensarlo antes de abusarme!

-¡Creí que lo disfrutabas!

-Nunca dije que lo hiciera... Y aunque no lo creas, te estoy salvando.

-¿Qué? ¡¿De qué mierda hablas?!

Minho suspiró firme y se acomodó sus gafas sin medida.

-De ser peor, de ser más despiadada. Porque no me sorprendería si aquí en el futuro no lastimaste a otros como a mí... por mi culpa y por el daño que te hice.

La chica solo se cruzó de brazos con mirada fulminante.

-Según tú, vienes del futuro ¿verdad?

-Aunque me creas esa es la verdad.

-¿Y qué sucede conmigo en tu futuro? ¿También me denunciaste?

-¡No! -exclamó Minho indignado-. Al contrario, te extrañaba. Pero mis celos hacia ti, pudieron más y nos separaron.

-Por eso ahora me aplaudías falsamente...

-¡Claro que no! Tú de verdad, de verdad tienes talento. Ojalá hubiera nacido yo con tu don pero, bueno no importa. ¡Solo trato de salvarte de ti misma! Eras una chica tan dulce y encantadora. Pero cuando nos reencontramos, solo vi crueldad y salvajismo puro en tus ojos. Sí, tenías derecho a odiarme, pero no así. El trato que te di, no merecías que atentaras en mi contra. ¡Sé que no lo merecía!

-Sí, hazte el digno ahora.

-Yo lastimé a mucha gente, demasiada. En el futuro yo me quedo solo, sin nada. Tanto que recurrí a lo impensable para sobrevivir. No quiero que seas como yo ni como Wookyung y no tengas a nadie a causa de tus actos que solo lastiman. Ese estudiante... Haesol, se nota que te adoraba pero... ¿cuánto crees que duraría? Hasta ya no soportar tus abusos así y solo irte. ¿Crees que alguien merezca vivir como tú trataste seguro todas tus parejas?

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