Ser elegido

Capítulo especial: What if del What if

Gracias a un comentario, me he puesto a pensar qué tan ooc pudo haber sido un Minho queriendo seguir con Doona. Así que a continuación un pequeño short de cómo sería si él la rechazara.

~•~

La pantalla de esa laptop proclamando a Cheon Doona como ganadora del concurso nacional de literatura.

Su primera reacción fue levantarse de forma abrupta de su silla más del susto que llorando de la derrota.

Había ¿regresado en el tiempo?

Ante su inadecuada actitud, la ganadora dejó de ser protagonista del lugar y todos fijaron sus rostros extrañados en Minho, quien parecía haber visto un fantasma entre todos ellos.

—¿Te encuentras bien, Minho? —preguntó un Donghoo joven frente a él. A largos pasos se le acercó.

Taekyoung lo miraba con frialdad ante el roba miradas de Minho, como si desaprobara desde el principio la posible reacción desfavorable de Minho que la chica ganara. Ya estaba rechazando otra de las rabietas de él.

Doona lo miraba como si Byun le quitara el aliento. Anhelante de las palabras de este. Un ¿Qué opinas? se le notaba en toda su cara.

Wookyung lo miraba con sorna y diversión. Estaba igual de expentante que los demás, que las cosas siguieran su mismo flujo y este saliera del club a romper en llanto como esa vez. Si se trataban de un sueño, estaba gustoso de repetir ese momento.

—Yo... yo... —balbuceaba Minho, queriendo salir de donde sea que estuviese.

Abrió la puerta y casi gritó del susto a no encontrarse con una negra espesura sino con el pasillo de la universidad.

Luego volteó a verlos a los cuatro. En general todos confundidos y preocupados.

Quiso sonreír en cuanto volvió a ver a esa chica de corto pelo rojizo de nuevo. Rumbo a despegar su carrera como autora si no fuera... si no fuera por complacer los celos de alguien como él.

Veía a su amigo Donghoo legítimamente preocupado por él. Aquel que no había lastimado, aquel que aún veía como un hermano. Todavía gustoso de verlo.

A un Taekyoung al que no temía encarar.

Y por último, un Wookyung que más que obsesionado con él, era su rival vencedor por el amor de Doona. Del que podría deshacerse con solo salir sin llorar por la derrota.

La vida le había otorgado una nueva oportunidad, y no debía desaprovecharla.

Podría aprender de sus errores y recuperar a sus amigos —menos Wookyung— y a su novia pero ¿de verdad? ¿Ellos merecían haber rebobinado los hechos y forzarlos a tenerlo a él en sus vidas? ¿Qué acaso no merecían mucho más que lidiar con un perdedor como él?

Pese a que había aprendido tanto tras perderlo todo, supo que en su corazón que seguía siendo el mismo aragán déspota y orgulloso de siempre. Minho de verdad no quería volver a hacerles daño, no confiaba en sí mismo para evitarlo.

Su destino era quedarse solo después de todo. Ningún milagro lo cambiaría aún con todo a su favor. Lo sabía, tarde o temprano sus malas decisiones harían que lo perdiera todo una vez más.