C A P I T U L O 20

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Estaba en mi última clase, a cinco minutos de que acabara y por primera vez no quería que eso pasara.

Durante todo el día no pensé en mi padre, yo estaba con Yongsun y sólo pensaba en ella, me olvidé por completo de ese hombre. Pero ahora sólo pensaba en que pasaría cuando pusiera un pie en esa casa.

Mordía la parte de arriba de mi lápiz con nervios y de un momento a otro cuando la campana sonó, casí corrí hacia la entrada principal.

Había quedado con Yongsun para vernos ahí, dijo que no quería irse sin despedirse.

Es un amor.

-Hola.- sentí como una mano tocaba mi hombro y después la pasaba por mi espalda lentamente hasta envolverme en un abrazo, el delicioso olor de su perfume llegó a mi fosas nasales com gusto.

-Hola bonita.- la saludé mientras entrelazaba nuestras manos por encima de mi
abdomen.

-¿Te llevo a casa?

-No, iré en bus, no te preocupes.

-Bien.

Me di vuelta quedando frente a ella y acaricié su mejilla.

-Te veré aquí mañana ¿verdad?- la urgencia en su voz se hizo notar.

-Tenlo por seguro.- dejé un beso corto en sus labios, el cuál fue correspondido.

-Bien, cuídate.- me abrazó y escondió su cabeza en el hueco de mi cuello y mi hombro.-Llámame si necesitas algo.

-Si, no te preocupes.- le di un beso en la cabeza y me separé del abrazo.-Nos vemos mañana, maneja con cuidado.

-Si.- me dio un besos un poco más largo que el anterior.-Adiós.

Caminé a paso lento a mi casa, no quería llegar tan pronto.

Al llegar vi su auto y solté un suspiro, entré a la casa y él estaba sentado en la mesa tomando unas cervezas.

-Por fin llegas.- dijo sin mirarme.-¿Dónde carajos estabas?

-Estaba con una amiga.

-¿Qué amiga?

-Rosé.

Soltó una risa que hizo que me diera un escalofrío horrible.

-Ven conmigo Moonbyul.- abrió una cerveza y la puso frente a él.-Toma una cerveza conmigo.

-Yo no...- me interrumpió.

-Te estoy diciendo que te sientes a tomar una cerveza conmigo.

Si he bebido, pero no lo hago mucho ya que tengo miedo, tengo miedo de volverme adicta y ser como él.

Me senté frente a él y le di un trago a la cerveza.

-¿Qué hiciste con esa tal Rosé?

-Sólo vimos películas y dormimos.

-¿Entonces no estabas con esa chica de la otra vez?

Le di un trago a la cerveza intentando calmar mis nervios, sentí como mi mano tembló cuando levanté la botella.

-Papá...- volvió a interrumpirme.

-Moonbyul, te daré una última oportunidad para que me digas que te has estado viendo con un hombre para follar y no con esa maldita chica enferma.

-Ella no es una maldita enferma, es una persona normal.- le contesté al instante.-Sus preferencias no la hacen nada diferente a cualquier otra persona.

-¡Todos los homosexuales son una enfermedad! ¡No entienden que la mujer fue creada para el hombre y ya!

-¡Esa es la cosa más estúpida que he escuchado! ¡Y si! ¡Tal vez me he estado follando a una chica, pero prefiero mil veces hacer eso a follar con un maldito hombre que sólo me usará como un juguete para complacer el maldito dedo meñique que tienen entre las piernas!- Me levanté de la mesa golpeándola con fuerza.

-¡Eres una maldita enferma!- se levantó y me tomó del cuello empujándome a la pared.

-¡El maldito enfermo aquí eres tú!- Puse mis manos en sus hombros y lo empujé intentando alejarlo de mi sin lograr nada.-Sólo te llenas la boca de mierda...- dije casi en un susurro.-Mi mamá te odiaría si supiera como actúas ahora, tú no eres para nada la persona con la que mi mamá se casó... Ella jamás se habría casado con un maldito monstruo.- hablé con dificultad gracias a su agarre en mi cuello.

De repente su rostro cambió y fue soltando el agarre en mi cuello, cuando por fin me soltó pude tomar aire.

Cuando me recuperé, lo miré y el solo miraba hacia abajo, estaba dolido, golpee su punto débil al hablar de mi madre, lo golpee donde sabía que más le iba a doler.

-No olvides que fue tu culpa que ella muriera.

-Pues preferiría que fuera mi culpa que tú murieras, preferiría que tú estuvieras muerto y no ella.

-¡Ya cierra la boca!- estalló su palma contra mi mejilla con tanta fuerza que la dejé de sentir.-Deja de hablar de ella...

-¿Por qué? ¿Te duele saber que si viera la persona que eres ahora le darías asco?- dije volviendo a mirarlo.

-¡He dicho que cierres la puta boca!- me tomó del cabello con fuerza y lo miré a los ojos, él estaba llorando... lo hice llorar.-¡Deja de hablar!- me golpeó en la cara con su puño.

Intenté mantenerme fuerte, se lo prometí a Yongsun, le prometí que esta vez me enfrentaría a él y cumpliré mi promesa.

-¡Déjame!- tomé la botella de cerveza que estaba tomando y la rompí en su cabeza haciendo que me soltara.-¡No me vuelvas a tocar!- apuntando con pedazo de vidrio grande que había quedado de la botella, estaba cortando mi palma pero no presté atención a eso.-¡Juro que si me vuelves a tocar un solo cabello te demandaré! ¡Estoy cansada de ti y toda tu mierda!- le di una patada en la entrepierna y cayó de rodillas al suelo, esta vez fui yo quien lo tomó del cabello y lo obligué a verme.-Te juro que lo haré.- dije entre dientes mientras acercaba la punta del vidrio a su rostro.

Lo golpee con mi puño con fuerza unas cuantas veces hasta que cayó al piso por completo.

Solté el gran pedazo de vidrio al sentir como mi palma sangraba y la miré, era una cortada profunda pero nada muy grave.

Antes de irme le escupí en la cara y subí a mi habitación a preparar una pequeña mochila para después salir de mi casa.

No planeaba dormir ahí, no por ahora, marqué el primer número en mis contactos y a los segundos respondió de la otra línea.

-¿Moonbyul? ¿Todo bien? ¿Necesitas algo?

-Hola Sunnie...- dije con alivio, con solo escuchar su voz todo lo malo desaparece.-¿Puedo dormir contigo esta semana?

-¡Si! Claro, ¿quieres que vaya por ti? ¿Dónde estás?

-¿Puedes recogerme en la farmacia que está cerca de la escuela? Necesito comprar unas cosas.

-Sí, llego en diez minutos.

-Bien, nos vemos.

-Ve con cuidado.

-Igual.

Corté la llamada y caminé a la farmacia.

No puedo creer que por fin me enfrenté a mi papá, se sintió tan bien.

Me sentí libre.

Love Me - MoonsunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora